Cartas de amor
Fecha: 03/09/2017,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Mi amor, te echo mucho de menos ya van muchos días sin verte, sabes te quería contar un pequeño sueño que tuve contigo mi amor, fue tan bueno que casi lo sentí real, te cuento: Soñé que estabas sentada frente a tu computador, vestida con tu camisa de dormir, entonces entraba yo y nos saludábamos con un apretado, largo y lindo beso, así seguíamos besándonos, entonces yo te tomaba por la cintura haciendo un lado lo que estaba sobre el escritorio te ponía sobre él, sentada frente a la silla, yo siempre tomado de tus caderas seguía besándote mientras me sentaba en esa silla donde tú siempre estás cuando estamos juntitos. Yo acerqué la silla a ti, mientras tú abrías tus piernas poniendo una a cada lado de mi cuerpo. Con mis manos comencé a acariciar tus piernas, mientras iba subiendo tu camisola acerqué mis labios a tus piernas y di un beso en cada rodilla, luego fui metiendo mis manos más arriba hasta que logré ver tus calzones, eran blancos de algodón tipo bikini los que a mí me gustan mucho, eso y la sensación de calidez y suavidad que sentía al acariciarte y besarte las piernas me excitaron cada vez más. La verdad es que con sólo tocar tus labios con los míos fue suficiente para lograr sentir esas cositas tan ricas que sentimos cuando estamos juntos, mi pene ya estaba creciendo. Y la verdad es que lo estoy sintiendo ahora mientras te escribo porque me acuerdo de ello, entonces seguí besando tus piernas ahora iba trepando por ellas, tu camisa de dormir ya estaba hasta tu ...
... cintura, tenía a la vista todas tus piernas y los calzones en los que se marcaba tu sexo, seguí besándote las piernas ahora ya iba por los muslos por la parte interna de ellos, tenía mi cara entre tus piernas, y tú las habías abierto más aún, era una vista de ti maravillosa sentada sobre el escritorio. Hasta que llegué a tu entrepierna sintiendo ese maravilloso olor a tu excitación, puse mis labios en tu calzón sobre tu vagina, estaban húmedos, calientes te di un beso hundiéndome en tus labios vaginales, mientras mi nariz rozaba tu clítoris, tú reaccionaste apretándome con tus piernas y tus manos sobre mi cabeza y lanzando un calido gemido, yo ya estaba muy caliente por lo que tuve que acariciar mi pene sobre el pantalón. Me puse de pie y tú comenzaste a desabrochar y sacar mi camisa, mientras yo desabrochaba mi pantalón, sacamos mi camisa y me besaste en el pecho, luego seguí con mi pantalón lo bajé y saqué completamente quedé en calzoncillos y mi pene estaba muy erecto sobresalía por sobre el elástico del calzoncillo, tomé éstos últimos y los saqué quedando todo mi duro pene a tu vista, me miraste, suspiraste y gemiste de maravillas mientras pasabas tu mano por sobre tu vagina, entonces me volví a sentar y me fui a tu entrepierna besándote con más calor, tomé tus calzoncitos por los costados y los tiré hacia abajo sacándolos completamente, los tomé y los llevé hasta mi nariz y mi boca poniendo la parte que cubría tu vagina sobre mi boca pasé la lengua sobre ellos ¡¡¡haaaaaa!!!, ...