Mi suegrita Sandra i
Fecha: 15/09/2018,
Categorías:
Confesiones
Autor: alex111317, Fuente: RelatosEróticos
Mi historia empieza como todas, soy casado, tengo un hijo.. en fin... una familia normal. Sucede que me han venido sucediendo cosas muy calientes con mi suegra. Ella se llama Sandra, tiene 42 años, está soltera hace mucho tiempo porque mi suegro la abandonó. Se las describo físicamente: mide aproximadamente 1,60, cara bonita, senos medianos y cuerpo normal... siempre había vestido muy recatada por lo que no pude ver lo maravilloso que era su culo y vagina... hace como tres meses ella empezó a cambiar su forma de saludarme, me da el beso muy cerca a la boca y trata de pegar su cuerpo al mío. Yo no le prestaba mucha importancia, ya que tenemos mucha confianza. Un día programamos un almuerzo en su casa y en efecto fuimos aquel día. Todo iba desarrollándose bien cuando le pedí el baño prestado para hacer mis necesidades, cuando me lleva una sorpresa que desde aquí cambio la forma de ver a mi suegra... en el baño vi colgadas 2 tangas súper tentadoras que me ponían a volar la imaginación, no puedo negar que me dio una arrechera tan grande que me atreví a bajar una tanga y la olí...según creo de las acababa de quitar porque tenían un olor delicioso, olía a hembra deseosa de mucho sexo, no tuve resistencia y me deje llevar por tremendo olor que ocasionó que empezara a lamerla y pegarme una pajeada que duro poco y descargo una buena cantidad de semen. Con malicia limpie mi pene con esa tanga esperando que no se diera cuenta. Así termino ese día tan excitante para mí, pero se me quedo ...
... en la cabeza la imagen y el olor de aquellas tangas. Creo que se dio cuenta de lo que hice ya que su forma de vestir cuando la visitábamos cambio (antes usaba faldas largas), empezó a usar ropa ajustada y jeans que le marcaban una bonita figura. Un día me escribió por WhatsApp y me mostró muy entusiasmada un leggins que había comprado para estar en casa (no entiendo porque me lo mostró) pero era a simple vista algo que la iba a dejar embutida ya que era pequeño y pensaba que no tenía un bien culo para lucirlo. Hace un mes volvió a invitarnos a comer y esta vez trate de acercar mi boca a la suya, fue un roce delicioso y la tome de la cintura pegándola más a mi cuerpo... después del saludo pude ver que tenía puesto el leggins y casi me muero cuando la vi... se le notaba una vulva impresionante y cuando procedimos a subir las escaleras tuve la suerte de que mi esposa subió antes y me quedé con mi suegra a quien le hice la venía para que subiera. Cuando lo hizo no pude ocultar mi mirada y le mire el culo... era impresionante, tenia unas nalgas grandes y se estaban comiendo el leggins, o no tenía ropa interior o tenía una de esas tangas tan excitantes que vi en la visita pasada. Volví a encontrar sus tangas en el baño y nuevamente fueron objeto de mi masturbacion y chorros de leche. Cuando fuimos a tomar la siesta me dejo recostar y empezó a arreglarle el cabello a mi esposa mostrándome esas nalgas tan deliciosas que se comían toda mi mirada, pude tomarle una foto. Mi verga estaba ...