El viejo conserje y la muy inocente universitaria. (primera parte)
Fecha: 17/09/2018,
Categorías:
Dominación
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... me corrí en su boca obligándola a que se lo tragara todo. Ella un poco más y vomita del asco que sintió. Ya hacia un par de minutos que el ascensor había llegado a mi planta y aun excitado y con la polla entre los labios de mi joven putita, llena de leche aun, que le goteaba hasta sus pechos, saque mi polla y con los pantalones bajados y cogiéndola de su rubio pelo, la arrastre hasta dentro de la habitación, mientras ella gritaba de dolor y lloraba pidiendo clemencia por el tirón de pelo que le estaba propinando. Cosa que no iba a suceder por supuesto, no pensaba parar de someterla, y de un empujón la tire contra el suelo y me senté en mi sofá delante de ella. La dejé ahí tirada mientras me desnudaba por completo, y le dije que hiciera lo mismo. Cosa que ella hizo mientras no dejaba de llorar. Entonces pude ver por completo su cuerpo desnudo con un culo perfecto y un coño que aunque con pelo parecía bien cuidado. Me levanté, me puse delante de ella y le ordené que se arrodillara de nuevo, colocándose entonces otra vez delante de mi ahora flácida polla. Cogí entonces mi polla, la puse delante de su cara, y le dije que abriese la boca y sacara su lengua. Ella lo hizo pensando que iba a chupármela otra vez, pero no fue así, comencé entonces a mearme en su cara y dentro de su boca. En ese momento pude ver una cara de terror que jamás había visto antes. Meándole en cara, su boca, sus labios, sus tetas, era una sensación increíble. Unos segundos después, cuando terminé, le dije: ...
... Sebas- ahora puta ve a fregarme los platos mientras descanso unos minutos, ¡vamos rápido! Cosa que ella hizo de manera inmediata. Tenerla allí, desnuda, llorando, sometida y humillada, delante de mí, era una sensación brutal y tengo que decir la verdad, no me podía esperar mucho más a follármela, así que no me lo pensé dos veces y apenas 5 minutos después de haberme corrido como un bestia, estaba empalmado otra vez. Me levanté y me fui hacia ella colocándome detrás de ella y poniendo mi polla entre su culo otra vez. Sebas- prepárate zorra, ahora vas a empezar a pagar de verdad la deuda de tu madre. A ver si es verdad que vales 4000 euros. La retire de la zona donde estaban los platos y la lleve hasta la mesa, la tumbe boca arriba y puse la cabeza de mi polla frente a su coño, y empecé a empujar con fuerza, pero estaba muy estrecho, no entraba con facilidad, a lo que ella no dejaba de llorar y de gritar. Quería partirla en dos, de modo que me aparte un poco, cogí un poco de aceite de oliva que tenía en la cocina y embadurne bien mi polla, su coño y su culo. De ese modo y sin más dilación, de un solo golpe, clave mi polla en lo más profundo de su coño, a lo que ella al sentirlo, grito estremecida de dolor y se desmayó. Yo no pensaba parar de follármela en ningún momento, no, seguiría follándomela sin parar ni un solo segundo, no pensaba dejar de disfrutar de ese instante. Pasaban los minutos y ella aún seguía desmayada por el dolor que sintió al ser desvirgada y follada por ...