Ana y el festejo de sus cuarenta años
Fecha: 28/09/2018,
Categorías:
Anal
Sexo con Maduras
Tabú
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... humedecida y totalmente dilatada, descargando todavía más semen desde el interior.Mi bronca comenzó a aumentar, pero mi sorpresa fue mayor todavía, cuando encontré que también emanaba semen de su ano y que podía meterle un par de dedos sin ninguna dificultad.Mi mujercita también había entregado su estrecho culo esa noche…Alguien le había echado como mínimo dos polvos o bien se la habían cogido entre dos tipos. No podía creerlo, mi mujercita se había dejado coger por extraños sin que yo estuviera presente…Seguí hurgando en su culo que no oponía ninguna resistencia a mis dedos; noté que seguía saliendo semen a borbotones; hasta que Ana empezó a gemir muy despacio esbozando una sonrisa en su cara.Entonces saqué mi dedo rápidamente y apagué el velador, pero ella ronroneó como una gata en celo y se quejó, balbuceando como pudo:“Quiero más…no seas puto… no me dejes así…”Me quedé quieto por unos segundos y ella siguió quejándose, lo cual hizo que sin pensarlo mucho volviera a meterle un dedo en el culo. Empecé a metérselo cada vez más adentro y ella siguió gimiendo suavemente.Al rato ya tenía tres dedos en su culo que entraban como si nada y lo peor de todo, tenía mi pija durísima, a punto de explotar…Me acerqué a su oído y le susurré: “Querés que te rompa el culo otra vez?”Ella preguntó, sin abrir los ojos: “Vos quién sos…”Lo primero que se me ocurrió fue decirle: “Soy Rudy…”Lorena contestó muy suavemente, con una débil sonrisa:“Vos ya me la metiste por la cola, ahora le toca a ...
... Fer…”Saqué mis dedos de su culo y me acosté sobre ella con todo el peso de mi cuerpo. Le metí la verga hasta el fondo, ya que entró con facilidad en ese culo tan dilatado y lubricado por el semen de sus compañeros de trabajo…Así estuve un rato dándole con ganas; después con suavidad, despacio, metiéndole la pija bien hasta el fondo, sacándosela entera y jugando con su dilatado ano.Ana no dejaba de gemir y retorcerse, levantando su firme culo para que yo pudiera sodomizarla mejor.En un momento suspiró: “Más rápido… tengo que volver a mi casa…”“Te voy a llenar de leche, putita…” Le susurré al oído, mientras redoblaba mis embates en su ya no tan estrecha cavidad anal.Mi sensual mujercita no me contestó y entonces se la saqué.Ella protestó y me suplicó que la llenara de leche caliente.Le volví a meter mi verga bien endurecida y le bombeé el culo con todas mis ganas, hasta que empecé a derramarme dentro de ella.Permanecí un rato sobre la espalda de Anita, con mi pija bien tiesa todavía enterrada en su trasero. Después me levanté para ir al baño.Al regresar la encontré en la misma posición; con el culo bien abierto y mi semen chorreando entre sus muslos, manchando las sábanas.A la mañana me desperté con el ruido de la ducha en el baño.La ropa usada de mi infiel mujercita había desaparecido de la vista.Anita jamás me confesó que esa noche se había dejado coger por sus dos compañeros de trabajo y yo nunca pude saber desde cuándo esos dos turros de “Fer” y Rudy la sodomizaban a gusto, ...