El tio vivo
Fecha: 30/09/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... dando!. Yo escuchaba por el auricular como Daniel le preguntaba: - ¿Te gustaría tener mi polla ahí para que me corriera sobre tus tetas?. Ella, ya muy excitada, le contestaba: - ¡Sí, sí, córrete encima de mis tetas... estoy deseando sentir tu caliente leche en mis pechos y pezones!. Pero el que se corrió de verdad sobre sus tetas, fui yo. Luego le esparcí mi leche por sus pechos dejándoselos bien pringados. Ella le preguntaba si también se había corrido él, al parecer, le contestó que estaba a punto de hacerlo ya que ella le dijo: - Ya que Pedro se ha corrido en mis tetas a ti te dejo que lo hagas en mi caliente coño... ¡Anda, échale toda tu leche dentro... ooooh... ya la siento... que calentita está... así, sí, córrete... aaah... que yo también lo hago... oooh...!. Así se corrieron mi mujer y nuestro amigo. Con Daniel quedamos un día para presentarlo a mi mujer y hacer así que se conocieran pues a Mary le picó la curiosidad para conocerlo de cara y nada más. Pero el resultado fue otro. Para ese día quedamos con Daniel en el parking de siempre a media mañana. Por cierto era un día lluvioso y frío. Estábamos a mediados de Diciembre pasado. A mi mujer le hice poner para la ocasión una minifalda negra, medias y bragas negras, así como el sujetador, y una blusa blanca semitransparente. Encima un abrigo. Cuando llegamos al aparcamiento, él ya nos estaba esperando. Al vernos bajó del coche y fue directamente a abrirle la puerta a mi mujer que, al sentarse y por lo corto de la ...
... falda, creo que le vio las bragas. Se dieron un beso en la mejilla y nos metimos en el coche, ellos dos delante y yo detrás. Empezamos una conversación normal, como de amigos, hasta que yo, desde atrás, le enseñé unas fotos de Mary desnuda y en poses excitantes. Daniel se relamía mientras miraba las fotos y luego le dijo a mi mujer una cosa que yo no sabía. Era que, por teléfono, él le había dicho que cuando nos conociera en persona él le daría un beso en cada pezón. Me quedé sin habla al ver como mi mujer se desabrochaba la blusa mostrándole el canalillo de las tetas. Nuestro amigo, entonces, le dijo: - ¡Mira como me estás poniendo!. Le cogió una mano a mi mujer y se la puso encima de la bragueta de su pantalón, que estaba abultada. Ella no lo rechazó, al contrario, estuvo sobándolo un rato mientras Daniel le sacaba las tetas del sujetador y, magreándoselas con las manos, empezaba a pasarle la lengua por los pezones. Mi mujer, que seguía sobándole el bulto que él tenía en la entrepierna, me miró para ver que decía yo. - Sigue, cariño - dije - No te cortes. Cuando Daniel dejó de chuparle las tetas le dijo a Mary: - ¿Ves como no pasa nada? Esto es el principio y ahora, si quieres, nos podrías hacer una paja a cada uno en el asiento trasero. Entonces mi mujer me miró diciéndome: - Ya me estáis liando más de la cuenta aunque la verdad es que me estoy calentando con tanto manoseo. Daniel puso el coche en marcha y lo aparcó en un lugar más apartado del aparcamiento. Con la lluvia y el ...