Por amor a la familia (día cinco - parte seis): El auto
Fecha: 02/10/2018,
Categorías:
Transexuales
Incesto
Autor: lesliefer, Fuente: CuentoRelatos
... experiencia alguna, nadie me había dicho como hacer eso, pero mi cuerpo parecía saberlo perfectamente, estaba listo para recibir a un hombre. Mis movimientos se reducían para no entorpecer los de el, simplemente presionaba mas mi cuerpo hacia abajo mientras me detenía con mis manos de sus hombros, sincronizadamente, me abría mi trasero, empujaba hacia arriba y yo hacia abajo. Dolía. Tenía mis ojos cerrados y mi boca entreabierta jadeando un poco. Súbitamente, sentí como si mi ano se hubiera roto, entro de un solo golpe la parte mas gruesa de su pene, el dolor era intenso, abrí mis ojos por reflejo al igual que mi boca, un sonido de dolor y placer salía de mi boca, y de la de el solo salían sonidos de placer. Yo me quede quieta, mi ano me pulsaba, el quería entrar mas, pero yo puse mis manos sobre sus muñecas impidiendo que lo hiciera, lo empujaba hacia abajo mientras mi cuerpo instintivamente trataba de ir hacia arriba, huyendo del dolor, pero me tomo de la cintura impidiendo mi escape. Sus movimientos eran lentos, trataba de entrar disimuladamente, como si no me percatara de que un poco entraba con cada pequeña embestida, me arme de valor, respire y exhale con fuerza, al tiempo que soltaba mi cuerpo y me dejaba caer totalmente sobre él, su pene llego hasta el fondo de mí, deje caer mi cabeza sobre su hombro mientras lo abrazaba, el comprensivamente se quedó quieto, pero sentía su pene palpitar. Acababa de ser desvirgada. Cuando el dolor fue disminuyendo, me enderece y ...
... comencé a moverme hacia adelante y hacia atrás, era una sensación totalmente nueva para mí, nada había estado ahí dentro antes, salvo el juguete que anteriormente el me había metido, pero la sensación era muy diferente. Entonces mis pensamientos empezaron a alterarse, fui consciente de mi situación, había pasado una noche maravillosa, había sido cortejada, ahora estaba en una calle en un parque solitario, con un vestido hermoso, con medias de seda en mis piernas, con mis pies presionados por unos hermosos tacones, con mi rostro maquillado, en la madrugada con un pene dentro de mí, un hombre me estaba penetrando, realmente estaba pasando!!! El dolor se había ido, ahora, sus movimientos hacían que me fueran tocadas partes de mí que jamás habían sido tocadas, tenía sensaciones que nunca imagine siquiera que existieran, el acariciaba mis brazos mientras yo estaba perdida en un limbo de placer, mi cuerpo se movía por si solo con movimientos tan naturales, tan femeninos, como una serpiente, mi cuerpo se había acostumbrado totalmente al de el, me tomaba del trasero y me levantaba con su fuerza, cuando caía podía sentir como el pene entraba hasta el fondo, cuando salía, podía sentirlo recorrer cada centímetro de mis entrañas, repitiendo este movimiento una y otra vez, y no me acostumbraba a el, cada vez que entraba era como si no recordara que acababa de salir. Los movimientos ahora no eran bruscos, eran lentos, pero precisos, sus manos tocaban mis brazos desnudos, tocaban mis piernas de ...