Le lamí el ano a mi nueva amiga - Relatos Eróticos

Le lamí el ano a mi nueva amiga

Esto pasó hace algunos años... No compartíamos mucho con esta muchacha, pero dado mi círculo social, siempre estaba presente. Ella es hermosa; con sus 19 años, casi inalcanzable para un muchacho inseguro como yo; un rostro muy armonioso, ojos celestes, tez muy clara y pelo rubio. También tiene unos labios hermosos, rosados y de mediano tamaño. De sus medidas, (como para contextualizar en esta historia) pechos firmes, delgada y un culo muy paradito y lindo qué, desde la primera vez que lo vi, soñaba con conocer. Dadas las circunstancias de la universidad... Terminamos siendo vecinos, vivíamos cerca de nuestra facultad. Inevitablemente empezamos a hablar más, compartíamos algunas materias... Y de a poco podíamos ser amigos... O al menos buenos compañeros... Un día organizamos una fiesta en la casa que arrendábamos con otros compañeros de facultad y la invité, accedió sin pensarlo mucho, pero se le veía con ganas de celebrar. Quedamos sentados juntos en un círculo de aproximadamente 10 personas; conversamos e inmediatamente me di cuenta que congeniábamos muy bien y que se daba muy fluida la conversación. Estábamos muy cerca, podía sentir su olor corporal, que era muy atrayente para mí, además de eso... Podía sentir algo que terminé pensando que eran sus "feromonas"; un "aroma" distinto que no podría definir. Solo que me causaba una gran erección, y excitación de tenerla tan cerca. Ya más ebrios, le propuse que se quedara en mi pieza, para evitar el viaje a su casa (era muy ...

... cerca... A 5 casas, pero me pareció una buena coartada) ella aceptó, dado que hubo muy buena onda, y supongo que la excitación fue reciproca. El plan era que ella dormía en mi cama... Y yo en un colchón que tenía al lado; a los minutos estábamos en mi cama besándonos, era un sueño... Estaba con la muchacha inalcanzable. Su boca, lengua y saliva sabían tan bien que recordé el aroma que le había sentido minutos antes... Y quise apresurar la faena para poder entrarle por su evidente húmeda vagina (pude comprobarlo mientras la tocaba), la tarea parecía que se podría llevar a cabo en breve, pero de repente y sin más me dijo "no puedo más por hoy"... Parecía una tragicomedia... Quedé casi en shock. No pude consumar mi nuevo amorío. Luego prosiguió "me dormiré, mañana te explico mejor y vemos si continuamos esto"... Confusión en mí... Ella abre mi cama y se dispone a dormir. Sin más, me voy a mi ventana, y en una escena un tanto poética, me sirvo un vaso de vino y lo bebo lascivamente... Su aroma no se me va de la mente... Es desesperante... Necesitaba saber de dónde provenía y si acaso podría tener más, estaba volviéndome loco. Me acerqué con sigilo, hasta llegar a su lado, y allí estaba la hermosa muchacha, como si de su cama se tratara, durmiendo como si el cansancio la hubiese derrotado después de un día muy duro (cosa que dudo haya sido así, ya que ese día no hubo mucho que hacer en la facultad). Me acerqué con mi nariz... Primero por su cara... Sus orejas... Todo me transmitía un ...