Pasión en los matorrales
Fecha: 17/10/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Xena_bruce, Fuente: CuentoRelatos
Era martes en la noche, y como era habitual, Xena salió a hacer algunas compras de última hora. Como algunos alimentos le hacían falta para preparar la cena, decidió ir a la tienda más cercana. Al encontrarla Cerrada, tuvo que ir mucho más lejos de los habitual. Por un instante lo pensó, ya que tendría que pasar por matorrales y “potreros” en medio del lodo y con muy poca luz. Xena iba vestida con un vestido muy cortico el cual hacía las veces de “pijama”, dejando ver sus voluptuosas piernas y dejaba asomar algo de su hermoso culo. También dejaba asomar sus enormes y deliciosas tetas casi al punto de dejar ver por poco sus lindos y grandes pezones. La rubia tomó valor, y decidió aventurarse por los matorrales sin percatarse que un hombre ya la seguía hace varios metros. Después de caminar varios pasos, Xena comenzó a ponerse nerviosa al sentir que alguien la seguía. Al poco tiempo un misterioso hombre la intercepto y le dijo: “No se mueva Monita (así se les dicen a las rubias en Colombia), quédese callada y no le va a pasar nada”, y mostrándole una gran cuchillo se acercó a ella. Xena quedo petrificada del susto y no se movió ni un centímetro, mientras que aquel hombre se acercó por su espalda y puso el cuchillo en su cuello. “que buen cuerpo tienes, que buenas tetas, están bien ricas” dijo el atacante. Sin esperar un segundo más, empezó a manosear sus tetas y las saco completamente del vestido, apretando con pasión y deseo los pezones y lamiendo los hombros de Xena. La ...
... Rubia estaba muy asustada, sentía el metal frio del cuchillo en su cuello, y el manoseo constante de sus senos, pero algo en ella también sentía algo de morbo, y eso la asustaba aún más. Luego tomándola del cabello el hombre la hizo arrodillarse frente a él diciéndole: “rápido, puta tetona, sáqueme la verga del pantalón, quiero que me la mame rico”. Xena se resistió al principio y le dijo, “no, no me obligue a mamársela por favor”, El atacante llamado “Raúl”, la tomo del cabello y nuevamente la amenazo con el cuchillo. Xena no tuvo más remedio que abrir rápidamente la cremallera del pantalón y sacar su verga. La cual por cierto era gigantesca. No podía creer lo que tenía frente a su rostro, ya que el tamaño de del pene era descomunal, más de 20 centímetros de una roja y dura Verga estaban a poco centímetros de sus labios. Xena pensó: “si se lo mamo con ganas eyaculará rápido y me dejara tranquila”. Así que se dispuso a tragarse el descomunal pene con su boca y a chuparlo como si fuera el más delicioso manjar. Raúl gemía de la emoción diciendo “que bien mama la verga esta tetona”. Por varios minutos Xena chupaba esa verga con muchísimas ganas, la escupía, lamia sus testículos e intentaba comerse el pene por completo, pero su plan empezó a fallar cuando Raúl le dijo, “pare Monita, quiero hacerme una paja rusa con esas enormes tetas”, y sin mediar más palabras puso su verga en medio de los senos de la rubia y se masturbo con desespero por varios minutos. Xena no lo podía creer, y ...