1. SEMILLAS DE INCESTO 2


    Fecha: 10/12/2018, Categorías: Incesto Autor: Nandincesto45, Fuente: SexoSinTabues

    ... atrajo mi mirada como un imán, para mi hija esta mirada no paso desapercibida y coqueta echo sus trenzas de cabello negro hacia atrás y mientras se acerca se destapa la otra, se las mamo con pasión haciendo que sus areolas se abulten, mi mano acaricia su vagina húmeda por encima de la braga, paso mi boca de sus teticas a sus labios y nos enzarzamos en un beso pasional donde cada lengua busca disfrutar el sabor del otro, mi dedo ya esta incrustado dentro de su vagina, me doy cuenta que ya no es virgen y me enardezco más, creo que a no ser por unas voces que se acercan esa tarde me hubiese follado a mi hija mayor. Un sábado mí esposa fue al pueblo con mi hija mayor y el niño para quedarse en casa de una amiga hasta el domingo, me quede solo con Juliana mi niña menor de 9 años, yo estoy con una bermuda puesta porque reparo una motobomba en el patio de la casa y ella por ahí revoloteando como una mariposa. Como esta en la edad preguntona; ¿Qué esto que es? ¿Qué para que sirve? ¿Que como funciona? Yo le contesto a todo y le digo: - Retírate que la voy a poner a funcionar, pero no me hace caso y sale un chorro de agua de 1” y le pega que emparamada que hasta la revolcó en el piso, yo sin poder contener la risa tomo la manguera, y la dirijo hacia ella y le hago un hidromasaje por todas las partes de su cuerpo y ella feliz se quita la blusa y la falda que tiene puesta, se para frente a mí solo en braguitas mojadas protegiendo la cara con sus manos, en un momento la lujuria me ...
    ... invade y enfoco el chorro a su vaginita, se quedo quieta dejando que el agua a presión la excite, en mi bermuda es notoria la erección viendo la expresión de su cara, primero con sorpresa y luego con placer. La dejo gozar un rato y luego apago la motobomba en medio de su protesta. Guardo las herramientas y la llevo cargada a su alcoba para secarla y ponerle ropa seca, quito su braguita y al ver por primera vez su rajita tan tierna, lisa y sus labiecitos vaginales apenas engordando, me entro un deseo morboso que me hace estremecer, además el recuerdo de cuando se pega a mi sobándose con deleite y creyendo que no me doy cuenta me produce una erección que trato de disimular. - Papito me duele el estomago me dijo. Pienso que es por el agua fría y traigo una botella de alcohol y empiezo a frotarle el pecho, los brazos, las piernas y por último la barriguita, pero con disimulo bajo mis dedos y le acaricio la vaginita, se agita, me mira con ojos expectantes esperando más, abre las piernitas: -Papito cómame la rajita primero, me susurra al oído con inocencia y enseguida se tapa la carita con las manos porque le dio vergüenza. Me quedo asombrado, ¿Por qué sabía eso a tan tierna edad? No pongo reparos a su petición y me lanzo a cumplir su deseo, mi lengua enloquecida que recorre todos sus pliegues encuentra su pequeño clítoris y se deleita con él, un orgasmo sublime le llega en medio de gemidos infantiles y espasmos espaciados. - Un, “papito métamelooooooooooooooo”, sale de su garganta ...