1. Me gusta más que me toquen otros


    Fecha: 04/09/2017, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... le dejaba tocarme por debajo de la falda el me dejaría tocarle los calzoncillos. Estaba sobre el mar, el sol me caía en los pechos y la barriga y Diego me acariciaba cada vez con menos vergüenza. En el autobús con mi compañero, cuando me tocó un rato noté un calor en las bragas que me subía hasta la barriga y así aprendí que tocándome como él me daba gusto. Ahora no era yo la que me lo daba, era como en las películas que había visto, era Dieguito que me frotaba curioso y agradecido, empecé a gemir y pensé que tenía que aprovecharme de aquel momento de inocentes descubrimientos. Gemí cuando en su exploración encontró ese botoncito que tanto me gusta apretarme y mi cuerpo empezó a temblar, miré hacia la playa y vi que no nos echaban en falta, miré a Diego que seguía embobado en mi sexo y vi la cala que sobresalía a unos cien metros de nosotros. -¿Me acompañas, primo, quiero enseñarte una cosita?- lo besé con lengua unos segundos y nadé hacia el risco- Llegó unos minutos después que yo y le costó subir. Me había colocado en un recodo de forma que veíamos la playa pero el perfil de la cala nos ocultaba y no se nos veía desde la arena. Diego salió del agua respirando acelerado, cansado por la nadada inesperada. Se quedó de pie mirando intentando recuperar el aire. Lo miré. Que bonito era. El agua sobre su piel, el sol haciéndolo brillar, el bañador... buff, el bañador se le pegaba al cuerpo por el agua, le marcaba la superficie del calzoncillo de red interior descubriendo una ...
    ... adolescencia curiosa. Estaba sentada de frente a él y abrí las piernas para invitarlo, "acércate mi amor", se acercó y se quedó mirándome desde arriba, aún no se había empalmado pero me miraba celoso, "¿por qué no te quitas el bañador primo?", y empezó a bajárselo, se desprendió de él y siguió de pie mirándome de arriba abajo. Tenía una pija no muy grande, estaba arrugadita y una pielecilla le colgaba delante, como a mi hermano cuando lo vi saliendo de la ducha hacía poco, era larguita pero finita y no la tenía tiesa como las de la peli pero a veces se le movía un poco. -Diego, ¿se te pone dura la cuca? Ya eres un hombrecito, seguro que ya te tocas- me pasé las manos por el chumino para relajarlo.- ¿se te pone dura y se te empina, Dieguito? -Sí, a veces, por las mañanas,... y por la noche si me toco, a veces veo la tele y si salen chicas guapas pues... -Y cuando se te empina ¿qué haces? -No sé...-bajó la cabeza avergonzado- me toco solo... -Diego, tu eres mi primo favorito lo sabes... -Sí... -Me encanta verte ahí desnudo, me gusta...-quería hacerme la experta y me seguí tocando el chocho y las tetas- verdad que si te pido que hagas cositas para mí, tú que me quieres me las haces ¿verdad Dieguito? -Claro dime...- su voz sonaba temerosa pero tan inocente que le sonreí. -Tócate para mí, quédate ahí de pie y tócate como a ti te gusta y ver cómo se te pone durita... Tardó en reaccionar, miró alrededor por si nos veían y tímido e inexperto se cogió la pilila y empezó a frotársela. Lo ...
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