1. Sexo con la cuñada. Sexo anal, no es infidelidad


    Fecha: 28/01/2019, Categorías: Incesto Infidelidad Autor: Lobo Feroz, Fuente: CuentoRelatos

    ... bajando, enjugándose e los flujos remanentes del orgasmo. Ninguno de los dos se atreve a dar el gran paso, entrarle en la conchita, ellas siente que no está preparada que estamos haciendo algo impropio, sus gestos dicen lo que sus palabras no se atreven. La calentura apremia, siento la molestia de una dureza que necesita encontrar consuelo, se lo hago saber, que me urge una satisfacción. Más dudas, es tiempo de hacer y no dejarla pensar. Coloqué un trozo de alfombra para que se pueda hincar y orar al dios del falo, se lo puse en la mano, comenzó a agitarlo, la cara está próxima, voy empujando con delicadeza para llevarla bien cerca, que sienta el aroma y el calor de la carne caliente, frotada en sus labios, no los retira. - Un beso, solo uno… otro más… con los labios abiertos… En la última orden un movimiento de pelvis hizo lo que restaba. No le sabía mal, despacio fue lamiendo aprendiendo los primeros movimientos de su primera mamada. - No te vengas en mi boca, por favor, no estoy preparada… Ese pedido cambió mis planes, me gustaba estar en su boca pero la idea de hacerle el culito rondaba mi cabeza desde mucho antes de entrar a ese escondite de sexo. - Déjame hacer a mí, no te voy a obligar a nada que no desees, vos déjame hacer, no vamos a fornicar, solo te la voy a meter por el culito. Chuparla es algo que no le haces a tu marido, entiendo que tampoco te lo hace por el ano, son lugares que él no te ha usado, entiende que esos lugares donde él no estuvo, como que no es ...
    ... infidelidad. No me creyó casi nada, pero ese razonamiento hecho a medida de mis necesidades pareció tirarme un salvavidas, sin decir más nada la coloqué de espaldas, el pecho tendido sobre la lavadora, la falda levantada, las nalgas expuestas al mi calentura. Todo ese maravilloso culito a mi disposición, urge la acción, no darle tiempo a pensar. Voy con la pija súper dura a frotarla entre los labios vaginales para tomar la humedad, mientras juego con el dedo ensalivado en el hoyo del ano. - No, no, por ahí no! Habías dicho que solo por mi culito? - Sí, claro no te asustes, solo para tomar tus jugos… La empuje un poco más, elevé las nalgas, mas afuera, y me acomodé para calzarla justo. El glande enjugado en su flujo vaginal, frotando los bordes del esfínter, le pedí que se agarre de las nalgas, que se las abra para poder entrar bien en ella, es la excusa para distraer mientras voy jugando a entrarle. Se siente bien estrecho, el grosor tropieza también con la inexperiencia para relajarse, necesitaré de toda la astucia y conocimiento para comerle el culito. Jugando con la cabeza en el esfínter conseguí con paciencia y perseverancia entrar la cabezota, atravesar el aro. La sentía suspirar y jadear por la resistencia natural y la dilatación que no podía controlar. - Ya está! tranqui, ya la tengo toda dentro… - Mentira, falta… Su mano comprobó que ni había metido la mitad. Ahora era calmar su ansiedad enseñarle a relajarse, jugando y avanzando despacio fui ganando su permiso, las ...
«12...4567»