1. Cuando las cuñadas crecen


    Fecha: 15/02/2019, Categorías: Grandes Relatos, Confesiones Autor: HolstCldrn, Fuente: CuentoRelatos

    ... dedos en su coñito. Anyelin mordía su almohada para evitar que sus gemidos se escucharan, mi novia hacía lo mismo. Necesitaba sacársela a mi novia y metérsela a Anyelín pero no podía! Lo hubiera arruinado todo. Cuando ya no podía más exclamé "me corro Yari!" para avisarle a la hermanita que debía taparse de nuevo. Me corrí sobre la nalgotas de mi novia, me puse el bóxer de nuevo y salí de la habitación. Volví a mi cuarto, eran casi las 3 am pero yo no dejaba de pensar en Anyelín y sus tetas. Cuando estaba dispuesto a hacerme una paja mi celular vibró, un mensaje de Anyelín decía: "Necesito que me cojas! Ve al baño en 5 minutos". Era peligroso, el baño estaba cerca del cuarto de los padres. Yo sabía que Yarisel estaba dormida, siempre duerme luego de sexo, pero yo también necesitaba gozarme a la hermanita. Toqué la puerta del baño, Anyelin abrió, solo vestía un camisón que ya le quedaba corto. No cruzamos palabra, le arranqué el camisón y le empecé a lamer los senos, mis manos no los cubrían, pasaba mi lengua sobre sus pezones erectos mientras ella metió mano bajo mi bóxer y me masturbaba. "Metemela!" me decía silenciosamente. Le besaba el cuello mientras mi mano inspeccionaba la humedad de su entrepierna. Estaba lista. Le mordí uno de sus pezones, su gemido fue más alto de lo que ...
    ... debía. En este momento supe que no podía haber mucho previo y arruinar la posibilidad de penetrarla. La tomé de las nalgas, la levanté y la puse sobre el lavado. Su coñito húmedo quedo a la altura de mi pene. La besaba mientras mi verga dura separaba sus labios, quería hacerlo lentamente pero ella empujó sus caderas hacia adelante. Era claro que la quería toda y quería que le diera duro. Mete y saca. Mete y saca. Obsesionado con sus senos trataba de lamerlos todos, de echármelos a la boca. Imposible. Le chupaba sus pezones, ella mordía sus labios y me miraba con pasión, con enojo, con preocupación. Era indescriptible. Sus gemidos no eran "ahhh"... Eran "hmmmm" con un ritmo que seguía mis embates contra su coño. Eran gemidos en un tono agudos alternados con un "siiiii… que rica verga" en el mismo tono. "Voy acabar en tus senos Anyelin" le dijo con un gran nivel de orgullo, ella obedeció sin dudarlo. Se bajó del lavado, se arrodilló frente a mi justo antes que soltara toda mi leche por segunda vez en la noche sobre hermanas diferentes. Esas enormes tetas llenas de mi leche! Vaya noche! Para finalizar se la metí a la boca y terminó de succionar lo que quedara por salir. Se levantó inspeccionando mi semen aún adherido a sus senos. "Mañana quiero ser la primera" me dijo con una sonrisa pícara. 
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