Con el papá de un compañero. - Relatos Eróticos

Con el papá de un compañero.

... tomo de sorpresa y cuando me la saco, empecé a toser de forma ruidosa, escupí todo los liquidos que tenía en la boca. Orale cabrón, regresa a mamar. Otra vez me la metí a la boca, seguía sin saber como asimilar lo que estaba pasando, estaba caliente, pero me seguía sintiendo extraño por el trato que me daba el sr., ya más tranquilo, me entro más verga a la boca, de repente el sr. se movio un poco, me agarro de una pierna y me jalo sin importarle nada, me raspe un poco la otra rodilla y senti un poco de dolor en la ingle, me acomodo, para que su boca quedara en mi ano. Con sus dos manos, me agarro de las caderas y metio su cara entre mis nalgas, me las mordía, lamía, pasaba su incipiente barba entre ellas, eso me calento mucho, me gustaba como me raspaba y que no le importara, si estaba limpio mi ano o no, me apretaba las caderas muy fuerte, sentía como sus dedos se hundían en mi carne, mi fuego comenzó a correr dentro de mí. Le mordía la verga de forma más ruda y también apretarle los testiculos con más fuerza. Separo un poco su cara de mi culo y sentí dos de sus dedos tratando de entrar en mí, al principio, por reflejo aprete mi esfinter, pero de inmediato me di cuenta que sería un error, y me podría traer muchos problemas, al principio me dolio un poco, después de más de dos meses de no meterme nada, mí elasticidad no era muy buena, pero me relaje y de inmediato mi esfinter cedio sin ningún problema, el sr. al ver que mi esfinter cedía, trato de meter un tercer dedo, cuando ...

... sentí solo puje un poco y entro el tercer dedo. No pinches mames, que te quieres comer toda mi mano o que pinche putito. Con la otra mano me dio una nalgada muy fuerte, gemí de dolor y deje de mamarle la verga; me dio otra nalgada más dura. Orale pinche puto, sigue mamando o le llamo a los compañeros del tianguis y te damos verga entre todos, jajaja. Seguía sin asimilar lo que me pasaba, me gustaba un poco lo fuerte del trato, pero me moría de miedo también. Me esmere en mamarle bien la verga, para que se viniera rápido y a lo mejor me dejaba ir, ya sin ningún problema, pero no se si por el alcohol o por que, no lograba hacerlo acabar. Deja de mamar cabrón, que casi me vengo y quiero romperte ese culo que tienes y que sabe muy rico. No entendía en ese momento lo que me decía, sabía que mi culo no estaba muy sucio, pero cuando me saco la primera vez sus tres dedos, salieron con un poco de matería fecal, aún que el olor a fruta echada a perder era fuerte, si me llegó un olor a mierda, esos dos olores combinados me dieron muchas ganas de volver, me avento a un lado, se paro y fue al inicio del camión y agarro un garrafon de agua. Ven acá. Me pare y me acerque a él. Empinate y abrete bien las nalgas. Yo me quede como estupido, sin saber que hacer, me avento casi a la entrada, como me agarro de sorpresa me caí. Ahora por pendejo, voy abrir un poco la puerta para que vean como te cojo, jajaja. No, por favor, no lo haga. Pues aplicate, muchachito pendejo, orale empinate de frente a ...