1. Los niños clavadistas de Veracruz (Segunda parte)


    Fecha: 08/11/2019, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Manu, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... albergado visitantes mucho más gordos, en particular pollones negros de Barranquilla o Cartagena, o también esas vergas descomunales de los machos brasileños ! José se movia con cuidado, limandome la colita con mucha destreza por ser principiante. Yo gemia de goce : una vergota en el culo y otra en la boca ! Que podía desear más delizioso?... 
    
    Los dos muchachitos se habían apoderado de mi cuerpo, y yo me sentía como al séptimo cielo. Dejando unos segundos de mamar la polla de Carlos, pedí a mis dos jovenes amantes de no desperdiciar su semen, y por favor de lanzarme sus chorros en la cara y en la boca. Fué Carlos primero que me avertió que estaba por venirse. José por asistir a la eyaculación de su compañero, paró sus embestidas. Yo me pusé boca arriba, en espera de los regalitos prometidos. Carlos, a horcajadas sobre mi pecho, acercó su pija de mi cara. El primer chorro fué corto, los siguientes mucho más fuertes y tupidos. El esperma corría sobre mi nariz y mis mejillas. Tontamente no había abierto mi boca a tiempo ! La corrida de su amigo excitó seguramente José, porqué, colocando su asta en frente de mi boca, me pidió abrirla bién... A riesgo de descolgarme la mandíbula, abrí ...
    ... la boca esperando el tirón de semen. No fué uno sino una ráfaga de chorros ! Su esperma salía con fuerza de la grieta de su capullo y se aplastaba en el fondo de mi garganta. Sentía como su leche estaba espesa, viscosa. Me la tragué con un placer indescriptible, lamentando de non haberla mesclado con la leche de su compañero... Lamé la última gota que se quedaba en la grieta del capullo. Los dos muchachitos se quedaron tumbados sobre la cobija, totalmente rendidos por sus corridas. 
    
    Yo habría continuado nuestros retozos mucho tiempo todavía. Y los dos pendejitos también me parecían listos para aceptar ese reto. Joder!, que machos son los Jarochos !! y desde muy jovenes... La pega estaba que se necesitaban dos horas para regresar a Veracruz antes el anochecer. Nos levantamos, volvimos a vestirnos. Mientras José doblaba la cobija, acerqué mi mano a su paquete : "La tienes todavía morcillona, mi guapo !... d Dejame también tocar la tuya, Carlos... Tu también estas listo para otra faena ! Que pendejos son ustedes !!!..." "Y tu, que putita eres !!!"...añadí José. La vuelta a Veracruz fué sólo risas y comentarios atrevidos. Cada uno contando a los dos otros sus sensaciones y sus gozos !!! 
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