1. Mis primeras experiencias anales


    Fecha: 05/02/2018, Categorías: Anal Autor: coleccionista, Fuente: xHamster

    ... expandirse a medida que sentía placer en mi vagina. Todo se sentía extraño, el placer en mi culo era mucho más lento que el que sentía al masturbarme. Tuve un orgasmo finalmente, y el dedo que tenía introducido se vio atrapado porque al apretar mis musculos durante el orgasmo este se vio atrapado. Cuando finalmente lo saqué la sensación de ardor persistía en mi ano, y dentro de él, era a la vez incómodo y a la vez erótico.Seguí practicando aquello, pero antes de que pudiese llegar a sentir placer, conocí a un tipo en la fiesta de una amiga que logro hacerme caer en sus brazos por aquella noche. Era varios años mayor que yo, aunque no me importaba para nada, me había calentado y ahora tenía que terminar lo que empezó. Nos fuimos juntos de la fiesta en el auto que le había prestado su papá. Manejó directamente hacia el estero de Limache, donde solo hay un camino por donde pueden pasar los autos sin contar el puente principal.Comenzamos a besarnos mientras yo acariciaba su erecto pene, notorio en su pantalón, totalmente duro, como si fuese a explotar ahí mismo. Esa noche yo no andaba con falda, asique el no podía tocarme ahí abajo, sin embargo, me agarraba las tetas con mucha firmeza, casi brutalidad. Esas manos eran fuertes y decididas, como nunca había sentido antes. De hecho, fue el segundo hombre con el que tuve sexo.De pronto se me ocurrió una idea, aunque me daba miedo, porque sabía que me dolería. Pero decidí entregarle mi culo a él. Ni siquiera supe su nombre. A esas ...
    ... horas de la noche nadie pasaba por ahí, asique decidí también ir un poco más lejos y le dije que me lo hiciera sobre el capó de su auto. Recuerdo que el ni siquiera titubeó. Salió del auto, y le seguí. Estabamos al frente de su auto ya, y comenzó a besarme mientras me tocaba el poto con fuerza. Y luego me sacó la chaqueta con la que iba, dejándome solamente en polera. Hacía frío, pero pronto la calentura me lo haría olvidar. Me levantó la polera hasta dejarla sobre mis pechos, también desabrochó mi sostén y lo levantó.La fuerza con la que agarró mis tetas al principio me dolió, pero todo lo que hacía, toda esa brutalidad, me mojaba. Definitivamente esa noche quería que me dominaran. Desabrochó mis bluejeans y me los bajó junto a mis calzones, metiendo inmediatamente su mano entre mis piernas, mojándose sus dedos al tocar mi palpitante vagina. Irremediablemente mis piernas se doblaron de placer mientras el me acariciaba ahí, pero duró poco pues pronto me soltó y comenzó a desabrocharse su pantalón.-Mójamelo –me dijo.Y yo sin responder me arrodillé obedientemente, y agarré su erecto pene para introducírmelo en la boca. Solo fueron unos pocos minutos que estuve chupándoselo, llenándolo con mi saliva cuando me dijo que me parara y le mostrara el culo. Entonces, llena de miedo y excitación me puse cómo siempre imaginé que estaría, y apoyando mis manos sobre el capó del auto abrí lo más que pude mis piernas y levanté mi trasero. De inmediato él me agarró el redondo culo con sus dos ...