1. Mi Mente Sucia 2 (Perturbándome)


    Fecha: 22/02/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... que era su primera vez, pero luego de un rato mejoró, lo que me hizo dudar de su inexperiencia... me pidió que nos acostáramos he hiciéramos un 69, el cual se turnó por varias ocasiones, el sobre mí y luego yo, sentía todo ese pene dentro, con un olor divino, mi parte favorita fue cuando estando sobre mi empezó a cogerme por la boca muy rápido y fuerte, casi me produce el vómito de lo rico y duro que se movía, le lamí suavemente los testículos (le daban cosquillas) mientras con una mano le pajeaba y con la otra sobaba su espalda grande y gruesa, que para ese momento se sentía tan erizada. Él se comía mi pene y lo dejaba muy mojado, sabia como ensalivarlo y lubricarlo con su rica lengua, Así estuvimos por otro rato hasta que me pidió que me pusiera en 4, para poder poseerme analmente, me lubrico un poco el ano que aun adolorido empiezo a exigir su pipe mojadito, me rosaba la puerta de mi culito con su cabecita rosadita y poco a poco lo fue introduciendo, yo apreté un poco al sentir el dolor, pero luego que ya estaba todo dentro no podía arrepentirme, lo tenía todo y necesitaba que esta vez no me doliera tanto, así que me relaje, baje todo mi tronco y levante más mi colita dejándola muy paradita, para que entrara toda su verga en mí; luego de unos minutos ya estaba muy relajado tanto que me empecé a menear en forma circular, como pidiéndole que me diera más y más; con una mano me tocaba el pene y me lo halaba un poco, experimente en ese instante otra sensación, que ...
    ... mientras estaba masturbándome me dolía menos el culito y en vez de sentir algo desagradable, sentía una sabrosura inmensa; a mis 14 años estaba descubriendo el inicio de una vida sexual con mi tío Lucas. Luego de estar dándome por un rato y de casi hacerme acabar de tanto placer en mi culo, me saco toda su pinga, y me pidió que le metiera la mía, yo no sabía qué hacer, solo le correspondí al ponerme todo nervioso tras su espalda ancha y sudorosa, a la vez fría por la noche, y viendo la luna puesta sobre nosotros pensé, que sensación, mire hacia arriba como buscando alguna señal que me hiciera creer que aquello era un sueño, pero no lo era, ahí lo tenía con su culote parado, sus piernas peludas, un culito redondito que toque y masajee con mis manos y su orificio pequeño que había dejado expuesto y sin un solo pelito; (se había preparado perfectamente para este momento) yo lubrique un poco la cabeza de mi pene y empecé a instruirlo poco a poco, el me ayudaba a meterlo, sentí que le dolió pero no era su primera vez, eso me gusto más porque pude sentir pronto como empezó a disfrutar con mi verga en su culo, como se meneaba e intentaba moverse en su son, luego yo con mis manos lo tome por la cintura y empecé a embestirlo a mi modo, lo tenía todo dentro, era solo mío... gracias a la luz que nos brindaba la luna sobre nosotros podía observar como mi pene blanco salía y entraba divinamente de su culo, como chocaban mis testículos con su nalgas en aquel vaivén tan impresionante. De tanto ...