1. Mi Esposota Alejita es mi adorada Puta Hermosa


    Fecha: 13/03/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: novio_de_Alejita, Fuente: xHamster

    ALEJITA, MI PUTA HERMOSA, ES TAMBIÉN MI ESPOSOTAPrimera parte, en la que cuento todo de mi amor por AlejitaVoy a contar sobre mi relación, tan especial, con Alejita, a la que conocí como puta y pronto la hice mi Esposota (mezcla de Esposa y Puta).Es un relato basado en cómo es ella, tremenda puta adorada mía.Alejita Muñoz, aunque no es muy alta, es una tremenda hembra con todas las letras, la conocí cuando ella tenía 36 años, trabajaba de puta y me la mandó la dueña de una agencia de putas a la que yo recurría dos o tres veces por semana para que me enviara putitas muy complacientes, que hicieran todo lo que me gusta y les pido.Apenas la vi, supe, por ese instinto que desarrollamos los que hemos conocido y nos hemos cogido muchas putas, que esa nueva hembra iba a ser especial para mí, y no me equivoqué.La describo tal como la vi esa tarde cuando ella me esperaba en la vereda.No muy alta, mide 1 metro con 52, unos 68 kilos, pelo ruludito largo hasta los hombros, color cobrizo, piel marrón (no morena ni negra: marrón, un color muy especial que no le he visto a ninguna otra), y sobre todo lo que más me atrajo de ella era su cuerpote macizo y carnudo sin ser gorda, que se mostraba provocadoramente entre el apretado jean y la corta remera que dejaba ver sobresalir sus caderotas firmes y anchas y su protuberante vientre duro, un vientre de mamita, como supe muy poco después. También la imaginé con unas hermosas patitas putas, lo que resultó cierto cuando se las vi.Me bastó verla un ...
    ... instante para que me excitara y deseé cogérmela inmediatamente, la imaginé desnuda mostrando ese cuerpo duro y que seguramente había sido preñado varias veces. Las mamitas preñadas me producen una excitación especial, y me había cogido a unas cuantas embarazadas con tremendas panzas, me fascinan las panzudas! Alejita en ese momento no estaba preñada, pero uso siempre la palabra “preñada” porque me suena más lasciva y sexual, más de hembra a****l que “embarazada”, que es una palabra que no me gusta. Una hembra bien preñada, con la panza dura y tremenda como un globo, y las tetotas hinchadas, llena de leche, y los pezones enormes y duros como nueces, es lo más que puedo desear para encamarme con ella, y en ese instante se me cruzó por la mente que desearía cogérmela a Alejita hasta hacerle un preñe... pero de eso hablo más adelante.Sus tetas eran pequeñas, y al caminar, Alejita se veía orgullosa de su físico, con la cabeza alta y la espalda derecha y firme, el pecho macizo y ancho, una mina hermosa sin ser bonita, pero sumamente provocadora, hasta a pesar suyo.En seguida oí su voz: cantarina, naturalmente seductora, y vi su cara sonriente, como dispuesta a entregárseme sin limitaciones. Me dijo: “Cómo estás? Soy Alejandra!”. Excitado como nunca con la perspectiva de tenerla debajo de mí cojiéndomela, apenas le dije “Hola!”, la tomé de la mano y un instante después la metí en un taxi rumbo al hotel más cercano, mientras ella me preguntaba: “Por cuánto tiempo vamos? Así le aviso ...
«1234...9»