Y eso que no es puta - Relatos Eróticos

Y eso que no es puta

... así me lo indicaron, aquí me surge una duda no tengo la certeza de que su clítoris sea muy pequeño o lo abultado de sus labios lo ocultan pero mi lengua apenas y lo percibía y no solo lamí y chupe también introduje mi lengua los mas que me fue posible y mi madre emitía apagados gemiditos, no pude esperar a que le llegara un orgasmo me estaba quemando por meterla la verga y creo que a ella ya también le urgía porque en ese justo instante ella dice ya bebe ya bebe ya hazme tuya, me coloque entre sus piernas y quise hundirle toda la verga de un solo impulso pero un ligero rayo de lucidez me hizo recapacitar si le hundía la verga de esa manera no duraría mucho y me controle, fue grandioso hundir solo la cabeza sus labios vaginales eran brazas ardientes así que repetí esa operación una diez veces antes de clavar algo más de mi verga, mi madre al sentir la mitad de mi verga dentro dio un enorme suspiro y dice, hay que rico, bien lo imaginaba estas tan bien dotado como tu difunto padre, hay bebe que rica verga tienes pero ya métela toda has que todo mi cuerpo vibre de placer hay bebe ya desinhíbete y trátame como la más vil de las putas eso me encanta y me excita al máximo, y como mencione mi cerebro ya no coordinaba y me olvide que la mujer que tenia debajo de mi era nada menos que mi madre Te gusta mi verga zorrita linda fue mi primer comentario, y ella, si mi macho, pues tela voy a clavar al fondo quiero ...

... escucharte gritar de placer putita linda, y empuje con tanta fuerza como si quisiera meterle también las bolas, y mi madre en efecto grito diciendo hay cabron algo empujaste dentro de mi paro no importa tu dale duro yo soporto todo y continúe empujando y empujando y mi madre gritando y gritando y diciendo hay cabron hay cabron así dale duro esto es lo que siempre había deseado, sentir una buena verga en lo más profundo de mi panocha (vagina) mis bombeos los hice con extrema violencia viendo que a mi madre eso la estaba asiendo feliz hasta que ella casi gritando dice, hay cabron, hay cabron me corro me corro y perdiendo por completo el control de su cuerpo moviendo violentamente su cadera exploto justo cuando yo también me corría No tengo la menor idea del tiempo que permanecí abrazado a ella y besándola en espera de que su respiración se normalizara pero fue el suficiente para que mi verga de nueva cuenta se pusiera dura y como no la había retirado mi madre lo noto y dice, hay cabroncito creo que te gusto tanto como a mí ya tienes otra vez la verga dura pues vamos a continuar cogiendo hasta que ya no podamos mas Creo que ese solo día recorrimos todo el kamasustra y fue hasta la noche que notamos que no habíamos parado ni para comer y por supuesto ambos nos encontrábamos sumamente agotados pero felices Si me animo más adelante les platicare algunas de nuestras aventuras ya que tenemos muchas y muy excitantes todas