1. ME ENTREGO A MI HIJO


    Fecha: 29/03/2024, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: ANTONIO, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... la mujer se metía ambos penes en su boca, sentí el miembro de mi hijo por primera vez chocar contra mi pene, evitábamos mirarnos, pero mientras se acercaba el orgasmo nos miramos, vi la lujuria en el rostro de mi niño, vi su calentura, sus ojos fijos en mí mientras gozaba, me di cuenta que yo también estaba tan caliente, no dejaba de mirarlo, hasta que ambos explotamos, mi leche se encontró con la suya, se mezcló, nuestras miradas seguían fijas uno en el otro. La puta se levantó y se fue al baño, nosotros nos recostamos en la cama, él encendió un cigarrillo y después de unas fumadas, me lo puso en los labios. Estábamos llegando muy lejos, ambos lo sabíamos.
    .- Te quiero mucho papá, dijo José
    .- Yo también a ti mi bebé dije.
    .- Vámonos a casa dijo él.
    .- Vamos, dije. Dejamos el dinero sobre la cama y salimos sin despedirnos de la prostituta. Mientras conducía por la carretera íbamos en silencio, habíamos llegado muy lejos en nuestra relación, ya no éramos el padre e hijos común y corriente, algo más emergía desde nuestro interior.
    Llegamos a casa, encendimos las luces y saqué un par de cervezas, nos sentamos frente a frente si hablar, nuestras miradas se encontraron, sin decirnos nada nos fuimos acercándonos hasta quedar su boca casi tocando la mía, nos besamos apasionadamente, sentí que nunca había besado a alguien con tanta pasión, tanta lujuria, mis manos inmediatamente comenzaron a acariciarlo, no podía detenerme y él tampoco, en un segundo estuvimos completamente ...
    ... desnudos. Acariciar su cuerpo fue una delicia, me detuve en su pecho, sus piernas, besé su cuello, su boca y luego bajé hasta tocar suavemente su miembro, estaba muy erecto, caía un hilillo de precum de su cabecita. Sentí deseos locos de darle mucho placer a mi hijo y sin pensarlo bajé hasta su verga y comencé a chuparla, no lo había hecho nunca, era torpe, pero quería que mi hijo pudiese hacer lo que su amiga no lo dejaba, no hubo necesidad que él empujara mi cabeza, yo me tragué su pedazo de fierro caliente, cada vez más adentro hasta sentirlo golpear mi garganta, lo miré hacia arriba, su carita lo decía todo estaba sintiendo tanto placer como yo, tenía todo su miembro dentro de mi boca. El sacó su verga de mi boca y me hizo entender lo que quería, nos recostamos en el piso y comenzamos un delicioso 69, sentí como José se engullía mi trozo de verga mientras yo me engullía el suyo. No soportamos resistir tanto placer y ambos nos corrimos, uno en la boca del otro, tragué lo que más pude, José hizo lo mismo y luego nos besamos traspasando el resto de leche deliciosa. Nos quedamos recostados en el piso, mi mano jugaba con su verga, al cabo de un rato reaccionó y se puso rígida nuevamente, yo también. Nos volvimos a acariciar, a besar enloquecidos, él acercando sus labios a mi oído me dice:
    .- Estoy loco por estar dentro tuyo papito
    Lo que me dijo aumentó más aún mi calentura y sin tener  ni el más mínimo de experiencia, le  dejé hacer, sentí como su pene buscaba un camino entre ...