1. Juan


    Fecha: 03/04/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... has deseado hacer esto desde que nos conocimos en el ínter, no dejas de besarme y de tocarme los pechos, te digo que no es justo que yo también quiero mamar, así que te acomodas y hacemos un delicioso 69 en el cual ambos tratamos de devorarnos al máximo. De repente siento venir mi primer orgasmo y te aviso para no llenarte, pero sigues ahí, en mi cosita luchando por sacar todo el jugo que lleva dentro, lo logras y te levantas triunfante, ves mi cara de satisfacción y te acercas a besarme, siento en tu boca el sabor de mis jugos, y me excito, me levanto del sillón y me acerco a tu escritorio donde me acomodo de modo que mis nalgas queden expuestas a ti. Entiendes mi invitación y tu fierro apunta hacia mi vagina, pero antes, me das unas pasaditas por el ano con tu verga llena de liquido, me mojas mientras me lo restriegas a tu antojo, y me amenazas deliciosamente con meterlo en mi agujero, te mueres de las ganas de estrenarte en el sexo anal, ya que nunca lo has probado, pero te pido que me excites dándome por mi vagina ese hermoso y tieso palo que tienes... en esa posición de "perrito" mi placer se desborda con cada embestida de tu verga, mis tetas se mueven al compás del vaivén que haces conmigo, me las tocas provocando en mi, más y más oleadas de placer. Te mueves y provocas que te apriete con mi vagina varias veces, no te lo esperabas, así que sintiendo ese placer no tardas mucho en vaciarte dentro de mí, siento tu liquido al estar llenándome, deliciosa sensación que ...
    ... logra excitarme aún más todavía, te dejo descansar un rato, te sientas en tu sillón, mientras que me acomodo sobre ti, me besas, y acaricias mi cabello mientras te repones, tocas mis tetas y mi panochita que sigue súper mojada, metes tu dedo en ella para excitarme, pero también tu pene se alborota y está listo para más acción, así como estás sentado, me mueves a mí, y empiezas a rozar con tu pene mi ano, siento que no me sostienen las piernas y me agarro del escritorio, tú te encargas de ir conduciendo tu pene a su nuevo objetivo, poco a poco, traes jugo del que estoy escurriendo y mojas mi ano con tu pene, siento tan rico cuando tu pene se pasea por mi ano, que te pido que me lo metas, me dices que no sea impaciente, has esperado tanto por este momento que no quieres que sea algo rápido, ¡quieres disfrutarlo al máximo! Y te comprendo, ¡aunque me muero de ansias de tenerte dentro de mi! La excitación corre por tus venas, puedo sentirlo por tu manera de tocarme, metes un dedo primero, luego poco a poco metes otro, ya son dos dedos en mi ano, qué rico siento, pero aún no estoy llena, quiero tu verga... te la pido, una y otra vez, hasta que por fin me concedes mi deseo, y tu pene empieza a introducirse lentamente y poco a poco para irse acoplando en mi ano, qué rico amor, mételo más, mételo todo ¿si? Delicioso, simplemente delicioso el placer al que me has transportado, mientras te cabalgo en esa posición, sintiendo tu pene en mi ano, mis tetas brincan arriba y abajo pero con tus ...