1. Lección de Amor (I)


    Fecha: 31/05/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... llevo. Subimos al auto. Mientras conducía le miraba bien, era muy lindo en ese cuerpo de adolescente deportista. No podía quitar de mi mente los sucesos del aula. Otra vez sentía una erección. Pero no podía dejar que la locura me ganara otra vez, lo iba a dejar en el club y darle dinero para el colectivo. Pero cuando llegamos al club estaba cerrado por desinfección. Le dije que llamara a su hermano y que yo lo iba a llevar hasta allí. Fue al telefono público y pude contemplarlo completo. Cada vez me atraía mas, y ya no podía ocultar mi erección. Cuando entró al auto me dí cuenta que mi perdición empezaba: -Mi hermano tiene apagado el celular y no tengo como avisarle que no tengo las llaves de casa-. -Bueno-dije-Vamos a mi casa que mañana te traigo al colegio-. Mientras iba para casa todo tipo de fantasías se me cruzaban en la cabeza, y en todas estaba Alan. Comencé a hablarle para tratar de distraerme y el me trae de nuevo a la situación del aula. -Quiero pedirle disculpas-me dijo. -No te preocupes son cosas de chicos-lo calme. Me colocó su mano en la pierna derecha y me miró: -Usted me gusta. Casí choco el auto. Me aparte de la calle y frené: -¿Que estas diciendo?-me arrebaté. -Que usted me gusta, con su cabello castaño, su cuerpo fornido y esos ojos azules... -Estas confundido-le dije. -No profe,... ademas note que estaba excitado. Se abalanzó sobre mí, paso su brazo izquierdo detrás de mi cuello y comenzó a besarme. Su pierna derecha se rozaba con mi pene erecto. -¿Qué ...
    ... hacés?¿Estas loco?-le grité. Volvió a su asiento y no volvió a hablarme. Pero yo ya no sabía que hacer. Retomé la marcha y nos dirigimos a casa. Cuando entramos le indiqué la comida en la heladera y le dije que yo no cenaría y me iba a leer a mi cuarto. En mi cama no conseguía leer mientras que el calzoncillo estaba completamente empapado de líquido preseminal. Me levanté, tomé un nuevo calzoncillo del armario y me dirigí al baño a lavarme. Entré olvidando que no estaba solo en casa y me encuentro a Alan completamente desnudo, sentado en el inodoro masturbandose. Quedé enfrentado a él, mi miembro erecto dentro del calzoncillo empapado le quedo proximo a su boca. No podía moverme, me tomo el calzoncillo, lo bajo y se metió mi pene en la boca, me retiro el líquido preseminal y comenzó a mamarlo. Comencé a gemir y mis dos brazos le tomaron la rubia cabeza por detrás y comenzaron a guiarlo. -Alan, Alan. ¡Mi muchachito!-gemí. Su inexperiencia me excitaba aún más. Mis manos comenzaron a recorrer toda su espalda, acariciándolo. Sus manos me acariciaban el culo. Cuando creí que iba a acabar le pregunté: -Te la metieron ya. -Nunca-me dijo. Lo incorpore y lo puse en cuatro patas. Me arrodillé detrás suyo y le pase porlos bordes del ano mi pija que tenía su propia saliva. Luego comecé a pasarle mi lengua y de a poco trataba de hundirsela. -¡Metemelá, por favor!-dijo. Lo penetre y gritó. Pero luego sus manos tomaron mis muslos y comenzó a manejarme. Gemía y suplicaba-Así, así... Le tomé de ...