La madre de mi niño - Relatos Eróticos

La madre de mi niño

... círculos en su clítoris y mis dedos anular y medio jugaban entrando y saliendo. Luego dejé ambos dedos adentro y comencé a mover mis dedos hacia atrás como si estuviera halandola hacia a mí. "Metemelo por favor.", gritaba. "Todavía.", era mi respuesta.Me encantaba verla gritar, me encantaba verla pedir, me encantaba verla desesperada por bicho, porque se que todo lo que le pidiera me lo concedería. Procedo a quitarme mi ropa interior y tan pronto llega al piso unos labios comienza a jugar con mi bicho. Pasó la lengua por todo mi bicho desde la base hasta el glande donde se introduce el mismo en la boca, mientras surge un gemido de placer desde lo mas profundo de mi. Su mano comenzaba a acariciar mis testículos, ella sabía que eso era mi kriptonita, mientras seguí introduciendo y sacando mi bicho de su boca. Saca mi bicho de su boca pasa la lengua por mis testículos y no aguanté más.La empujé hacia el mueblo, extendí sus piernas como se abre un libro donde sabes la página que vas a visitar. Agarro mi bicho ya con toda la saliva que su boca podía producir, y lo inserto poco a poco mientras veía como su cabeza se echaba hacia atrás, sus ojos se cerraban su boca se abría en forma de O y exhalaba un gemido q declaraba por fin. Fue tan lenta esa primera penetración que ella podía calcular la medida de mi bicho. La besé mientras entraba poco a poco en su sexo. Ya el olor ambos sexos mezclandose era demasiado."Métemelo más duro.", me ordenó, yo obedecí sin pensarlo mientras me ...

... llevaba sus dos piernas a mis hombros. La penetración era extremadamente profunda y ella lo sentía en su interior y comenzaba a gritar cada vez más. Sus uñas pasaban por cada centímetro de mi pecho mientras las estocadas eran lenta pero fuertes y profundas. Lo saco y la cambio de posición.La puse en su posición favorita, 20 uñas. En ese momento veo sus nalgas hacia a mi y no dude en un momento en besarls y morderlas. Ella me dijo: "Como las extrañas, lo se.", mientras sonreía. Comienzo a buscar su chochita con mi bicho, rozando su clítoris con mi bicho y gemíá de placer. Logrando entrar por fin comenzaba las estocadas que anunciaban gritos de placer. Comenzaban las estocadas que señalaban la pronta venida y finalmente comenzaba a llegar. Su cuerpo me declaraba q pronto vendría el tan anhelado clímax, q ella extrañaba y su actual novio no lograba satisfacer. Procedo a buscar mi mano derecha y acariciar su clítoris mientras las estocadas continuaban. "Sigue así, sigue así. No pares, no pares."Su cuerpo comenzaba a estremecerse y un grito incesante comenzaba a inundar mi casa. "Puñeta, hace tiempo no sentía esto. Rick cómeme el culo.", me ordenó. Procedo a obedecerla y busco mi lubricante y comienzo a masajear el área. Ella lo disfrutaba y me decía que ya. Procedía a masajar mi bicho con lubricante y comencé a entrar poco a poco. Ella ya había llegado a su orgasmo, no existía el dolor, todo era placer. Por fin entró en todo su esplendor. Suave y lento, era la orden del momento. Ella ...