1. Mi suegra es una mujer muy llamativa maduras


    Fecha: 03/10/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: flowhot, Fuente: RelatosEróticos

    ... nuestros cuerpos en uno solo. La penetre de un solo empujón, metiéndosela lo más adentro que pude, mientras mis manos le agarraban el culo para aumentar nuestro contacto. Con mi verga dentro de su cuerpo, me monté yo ahora sobre ella y la penetré más adentro aun. Un fuerte gemido de su parte, sus piernas abiertas y sus manos en mis nalgas y yo en las de ella, comenzamos a follar con deseo animal. Aun no podía creer que la madre de mi mujer estaba bajo mi cuerpo, con sus piernas abiertas, recibiendo deseosa mis embestidas. Una y otra vez mi verga se pedio en la húmeda cavidad de su entre pierna, haciéndola gemir de placer. Pero mi deseo no era follarmela , sino chuparle las tetas, ese sueño que tenia hace años al fin se hacía realidad. Se la saque de su concha y baje mi cara hasta esas tremendas ubres, gigantes, deliciosas. Las tome entre mis manos y revolqué mi cara sobre ellas, se las chupé con toda mis ganas, jugando con sus pezones dentro de mi boca, aplastándome la cabeza entre semejantes carnes. Que tetas tenía esa mujer, que hermosas y grandes tetas, no podía creer que al fin estaba entre ellas. Por mucho rato no deje de chupárselas, mientras ella me acariciaba los cabellos. Pero luego de un rato, sin darle tiempo a reaccionar, bajé hasta su entrepierna y aunque quiso evitarlo, no alcanzó, cuando ya mi cara chocaba con una frondosa mata de pelos y mi lengua se encontraba con una jugosa concha. Se la chupe con la misma pasión que le chupe sus tetas, restregándole la ...
    ... cara entre ellas. Ahí mi suegra se soltó por completo, comenzó a quejarse muy fuertemente entregándose a las caricias que su yerno le entregaba. Gritaba de placer y trataba a cada rato de sacarme, diciendo que por favor no lo hiciera que si no la haría acabar. Aguante unos minutos ahí saboreando los jugos de mi suegra, pero a las finales me salí, porque mi intensión era darle a esa madura mujer una noche de placer que no olvidaría. Me salí de entre sus piernas, me paré en el piso y prendí la luz. Mi suegra completamente desnuda sobre mi cama, se tapa la cara con una almohada pidiéndome que por favor apagara la luz, que le daba vergüenza. Fueron solo unos segundos, pero la visión de ese maduro cuerpo desnudo, quedo grabada en mi mente. Sus enormes tetas cayendo hacia los lados por la fuerza de gravedad, mas grandes de lo que yo iaginaba, sus pezones rosados, arrugados, sus piernas gruesas , blancas como el resto de su cuerpo y entre ella una champa tupida de pelos largos , negros, realmente un espectáculo. Aprovechando el dimer que había instalado, no apague la luz, si no que bajé la intensidad de esta al mínimo , para poder ver ese voluminoso cuerpo. Nuevamente me acosté y me coloque a su lado, dándome ella la espalda. Me apegue a ella, le levante una pierna y me la comencé a follar por detrás, mas suavemente que en un principio, mientras sus nalgas que se movían al compas de mis embestidas y mi mano no dejaba de recorrer ni un centímetro de su blanco cuerpo.. Le hice cambiar de ...