1. A -03:12:39. Táctica y su estrategia, no la mía


    Fecha: 21/11/2018, Categorías: Dominación Autor: Caminante, Fuente: CuentoRelatos

    ... piernas separadas, mañana es el día de la hemorragia, por tanto verán como gotea, ya que deberás separar mis rodillas, como si fuera tu deseo, tengo la seguridad que sus mujeres responderán y no para mal, sentirán envidia, ellas desearían estar al lado de sus hombres, pero estos las apartan, eso es cosa de hombres, cuando muchas mujeres han combatido y muerto al lado de sus hombres en combate, tú de esa forma me tratas como un igual. Has dispuesto de mí, de mi compañía a tu lado, de mi cuerpo, de mi sangre, y no me has apartado en esos momentos de peligro. Pensé por un momento si había algo más de fondo. Me falta algo importante, una causa. ¿Te refieres a un precio? – Me corrigió. Iba por delante de mí. Puede ser – Aseveré. La hay, ya que no entras en razón y el destino ha dispuesto que yo no esté dispuesta. Esto estaba cambiado, pero no podía adivinar que podía ser, guardé silencio. Soy hija única, mi padre quiere heredero, herederos, quiere que le dé hijos, se está haciendo viejo y no quiere que yo ocupe su lugar, soy mujer, ese trono es para un hombre. No me sorprendió mucho, y me parece que algo de esto había dejado caer al principio, pero me hice el despistado. Resulta que soy sospechoso y aun así quiere utilizarme, esa contradicción no la comprendo. Te aplica la ley de la ventaja, él sabe todo lo que pienso y siento, por tanto no le queda otro camino, sabe que te persigo ...
    ... como una perra en celo. Sin embargo en estos momentos es difícil que me embaraces, no imposible, pero si es complicado, sé que mis defensas son poderosas y por otro lado, ignoro como son tus espermatozoides y de su fuerza. De nuevo cerré la boca. El precio ya sabes, metal, metal valioso, podrás vivir del cuento, no tendrás que trabajar, y dejar esa empresa cuya dirección es ciega, no sabe valorar al personal que tiene, mi padre me dijo que puede comprarla y ponerte al frente, así podrías vengarte, tú decides. No, el mal rollo no me va, prefiero buscar otro trabajo, he probado el frío y amargo sabor de la venganza, que me llevó tres años y medio prepararla, y aunque han pasado muchos años, aun me sigo arrepintiendo de haberme vengado de aquel cabrón, que fue cortando mis subidas de sueldo, siempre decía que algo habría hecho, pero jamás dijo la causa. Tu recuerdo me duele, aquel beso que tu rechazaste, yo era muy joven, pero algo si te robé y esa parte tuya que llevo dentro es un potente imán que me empuja hacia tu cuerpo, y por más que la he analizado no he llegado a ninguna conclusión, ignoro que es esa fuerza que me ciega y me hace entregarme a ti sin límites. Silencio por mi parte, de nuevo volvía a la carga. Ahora mismo, mi vagina se estremece, se tensan sus paredes esperando la entrada de tu penetrador. Entiendo lo que piensas, no te dejo respirar, pero te he explicado la causa. 
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