LOCURA DE UNA NOCHE - Relatos Eróticos

LOCURA DE UNA NOCHE

... pecho peludo. Lo dejé porque lo esta disfrutando. Yo también lo seguí tocando, su trasero era grande, muy duro por el deporte, muy peludo y me gustó. En el suelo el me quito el cinturón y me desnudó, y el también lo hizo. Me quiso poner en cuatro patas y lo dejé, pero no me metió su pene, pero mi ano estaba ardiendo, ya sabía lo que quería. Nos pusimos de pie, desnudos y lo comienzo a besar en el cuello, el comienza a gritar de placer. De pronto y con una fuerza de animal me gira, me toca la espalda y me hace agacharme sobre el sillón más cercano. Sin escupo sin lubricante sin nada, me mete su pene en mi ano. Me dolió mucho, me ardía, pero sólo escucharlo gemir me volvía loco, al par de minutos mi ano dilatado estaba recibiendo el primer pene de su vida. Me gustó tanto que me comencé a mover por mi cuenta, el me rasguñaba la espalda y me tiraba el pelo y yo era una perra con un pene en mi ano y lo disfrutaba. Luego decidió sacarlo, de la nada, no terminó en mí. Luego se agachó y comenzó a chuparme el pene, con su boca barbuda, su lengua de hombre a agitarse como perra en mi pene, lo disfrutaba y se lo tragaba entero, eso fue maravilloso, nunca me lo habían chupado así, como sólo otro hombre le gusta que se lo chupen, lo escupía, lo miraba, me miraba a los ojos y yo le tiraba el pelo apra que entrara con más fuerza, se pone de pie y nos besamos, yo tampoco terminé en su boca. Pero escuchamos ruido en la habitación y decidimos parar e irnos. Camino a casa hablamos del tema, ninguno entiende que pasó, tampoco lo hemos intentado de nuevo, somos hombres, calientes, y culo que se nos ponga encima, se nos para, esa fue nuestra conclusión. Ahora este episodio es mi mayor motivación para masturbarme, no me siento gay pero agradezco la experiencia, espero que más de alguno se toco hoy pensando en mi.