SEXO ORAL EN ORURO
Fecha: 27/11/2018,
Categorías:
Gays
Autor: gonzo00, Fuente: RelatosEróticos
... a pegar mis últimos anuncios. Finalizada mi labor guardé la esperanza de que alguien lo leería y me llamaría, así que me espere un buen rato por los alrededores de donde había dejado mis anuncios, incluso me fui a sentar en una de las bancas de la plaza como lo hacen los viejitos. Así se fue la tarde, ya obscurecía y nadie llamaba, decepcionado por no haber logrado mi propósito me marche a casa, me sentía desilusionado por todo el trabajo que me había pasado en vano. Al día siguiente volví al centro de la ciudad, vi uno de mis anuncios y pensé que quienes lo habían leído lo tomaron a broma al igual que los anuncios que se encuentran escritos en los baños. Pero me pregunte también que hubiera pasado si tan sólo uno de los que leyeron mis anuncios lo habría tomado en serio y se hubiera atrevido a llamarme. -De seguro en este momento aún lo estaríamos pasando bien- y me puse a imaginar cómo sería ese lujurioso encuentro: Los dos en la intimidad de una habitación… o mejor aún, ni siquiera pasaríamos de la sala, el caso es que él se pondría frente a mí con su erección formando una carpa en su pantalón y yo me sentaría en el sillón teniendo muy cerca de mí el tentador espectáculo de su excitación. Sin pensarlo liberaría la presión de su pene abriéndole el pantalón, dejaría que salga hacia adelante ensanchando su ropa interior, el primer toque a esa verga para tantear su grosor y tamaño sería encima de su calzoncillo, obviamente también tocaría sus bolas ahí abajo, de seguro le ...
... gustaría la forma en que pase mi mano rozando su pene encima de la tela. Y sin mayor tardanza le llevaría la ropa interior para abajo, pensándolo bien, le bajaría el pantalón y el calzoncillo al mismo tiempo, y ya teniéndolo desnudo de la cintura para abajo, no me aguantaría las ganas de ser tentado por el aroma y el calor que desprenda su verga, de inmediato me lo metería en la boca y comenzaría a chupar su pene. Hasta que se ponga más erecto no soltaría ese pene de mi boca, hasta mojarlo, hasta sentir lo largo que es dentro de mi boca, hasta sentir esa rica punta abriéndose paso sobre mi lengua hasta mi garganta. Me consumieron las ganas en ese momento de sentir esa verga en mi boca y sin poder disimular por completo mi placer me fui a sentar en las gradas de la catedral que es lo más cercano que tenía en ese momento, una vez sentado cómodamente me puse a fantasear con más ganas. Me metería en su culo y me pondría a lamer sus bolas, las saborearía, las chuparía sin detenerme y por sus gimoteos sabría que él lo está disfrutando también, que lo esta pasando tan bien como yo, lamería sus ricas bolas con tremendo deseo mientras mi mano cruza entre sus piernas hacia adelante para acariciar su rico pene erecto, firme recibiendo mis caricias, a momentos se lo agarraría y lo masturbaría hasta hacer que menee sus nalgas, entonces sus bolas entrarian en mi boca y sus nalgas se abrirían a los costados de mi frente, nunca me había imaginado comerme unas bolas así, dejando que me invada con ...