Las vacaciones en el valle de Parabachasca I - Relatos Eróticos

Las vacaciones en el valle de Parabachasca I

... sofocación.Con las primeras luces del sol me desperté y no pude dormir más, me coloqué un pareo sobre mi bikini y fui al comedor cocina donde me hice un café. La estadía me parecía no iba a cumplir mis expectativas, mucha naturaleza y mucha soledad, en un lugar alejado del Mundo y carente de comodidades propias de una ciudad, como me gustaba a mi.La dueña de casa me preguntó si quería acompañarla en tareas de la granja y le dije que sí, ordeñamos unas cabras, buscamos huevos del gallinero, recogimos unos choclos etc ya si pasé la mañana. Sobre el mediodía llegó un taxi con dos jóvenes universitarias que venía a alojarse.Almorcé con ellas y los dueños de casa, las primeras ya habían estado en una oportunidad, y las alojaron en mi habitación. Dormimos la siesta y luego de despertarnos fuimos las tres al rio. Ahí jugamos con el agua, conversamos, tomamos mate, yo les sugerí hacer toples y aceptaron sin disimular su beneplácito.En un momento fueron al sector del rio que era una pileta natural y se lavaron el pelo, se bañaron, para lo cual desde ya se desnudaron bajo el agua, lavaron parte de su ropa. Ante mi mirada me dijeron que daba la precariedad del baño de la casa mejor era hacer todo en el rio.La rutina de la noche se repitió y nos fuimos a nuestro dormitorio, antes las dos se quedaron una rato en el palier conversando. Yo que siempre duermo desnuda no sabía si hacerlo, ya que a ellas no las conocía y me tendí en mi cucheta en ropa interior. Al rato vinieron y nos pusimos ...

... a conversar de la vida. Ambas estaban terminando sus carreras universitarias, en la charla de a poco se fueron sacando su ropa, el calor apremiaba y en unos minutos ambas estaban desnudas sobre sus camas.Yo me sonreí y me desnudé también.El calor y el cansancio me hicieron caer en un profundo sopor, en algún momento de la noche me desperté y las miré, sus jóvenes cuerpos pese a no ser esbeltos me despertaban curiosidad, las gotas de sudor ya eran un surco entre sus pechos e ingles bien depiladas.Con poco para hacer el día siguiente repetimos nuestra rutina en el rio, pero en la mañana. Esta vez nos desprendimos de nuestras mallas de entrada y armamos una rutina por la cual una iba a estar más atenta a si venía alguien si estábamos fuera del agua. Estaba yo tendida en una roca cuando veo que ambas se dan un beso profundo, con la escusa que quería volver a la casa, me alejé unos metros y me puse a espiarlas.Ellas suponiendo que no estaban siendo observadas y sin salir del agua siguieron dándose besos profundos, y sus manos y brazos se confundieron en un ballet sensual y erótico, un brazo de cada una fuera del agua, besándose profundamente y su otra mano extendida bajo el agua,sin lugar a dudas en sus zonas más erógenas.Al rato extenuadas salieron del agua y se coloraron sobre una piedra, entonces regresé las saludé con una sonrisa.La siesta no deparó nada nuevo, pero me permitió ver sus diferencias y similitudes físicas, ambas rubias, depiladas a full, una entrada en kilos,la ...