1. Mi enamoramiento


    Fecha: 17/10/2017, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... yo había sentido los mismos deseos desde ese día. Ahora yo disfrutaba acariciar su miembro y él aullaba de placer, éramos como dos animales en celo, instintivamente comencé a morder sus tetillas, a lamer su hermoso y definido pecho… ¡aaah!… era todo su cuerpo el mismo manjar de los propios dioses.Poco a poco bajé con mis labios candentes a su vientre y recorrí aquel abdomen marcado y perfecto, acto seguido tomé con las dos manos aquel indescriptible pene como mi más preciado trofeo e intenté introducirlo en mi boca, tenia una cabeza gigantesca de color rosa, y que de ella salían abundantes gotas de líquido pre seminal, su tamaño era tan grande que no cupo en mi boca, entonces comencé a chupar por todo el largo de aquel descomunal instrumento, apoyando mis manos en sus preciosas nalgas, lamí con mucho entusiasmo y delicadeza aquellas grandes pelotas que le colgaban. Yo bajaba y subía la lengua como un niño comiéndose una rica y deliciosa paleta de helado. Nunca en mi vida había tenido entre mis manos y labios el miembro de otro hombre, carecía de experiencia, por eso solo seguí mis instintos y no me cansaba de chupar y lamerlo feliz de oír sus gemidos y suspiros de placer.Raúl acariciaba mi cabello y atraía mi cabeza hacia su pene, hasta que de pronto su cuerpo se estremeció y su miembro creció aún más. En ese momento abrí la boca lo más grande que pude y me tragué aquella gran cabeza, inmediatamente sentí sus grandes descargas del más preciado néctar dentro de mi boca, fue ...
    ... demasiado para mi tragar de una vez y de mis labios escurrieron grandes cantidades de blanco y espeso semen, su sabor fue tan delicioso que me invitó a disfrutarlo cada segundo, mi cuerpo también se estremeció y por primera vez tuve una venida maravillosa jamás antes conocida.Nuestros jugos se mezclaron y froté mi cuerpo con aquella mezcla de tan fino elixir, él me las retiró con su lengua y labios con mucha ternura, y las compartió conmigo en mis labios, besándonos nuevamente, era excitante y sin darme cuenta, de mis mejillas rodaron un par de lágrimas por la emoción, posteriormente me recosté sobre su pecho por no se cuanto tiempo hasta volver en si, nuevamente comencé a chupar aquel pene semierecto, era un pene bellísimo que desafiaba su propia naturaleza, le limpié todo rastro de líquido seminal y él como recompensa me dio otro largo y apasionado beso.Perdimos la noción del tiempo hasta que unas voces con mi nombre se escuchaban a lo lejos, nos vestimos rápidamente antes de que nos descubrieran, nos despedimos con un abrazo y un largo y delicioso beso sin antes yo volver acariciar el bulto que tenía en su entrepierna. Me dijo antes de marcharse que nos volveríamos a ver en la escuela para poder planear la continuación otro día de aquel encuentro.Mis compañeros llegaron y preguntaron por qué me había alejado tanto, me disculpé y les comenté que me gustaba observar ese paisaje, ya que era nuevo para mí, en ese momento nos retiramos del lugar para posteriormente regresar a ...