La transformación de Laura (6)
Fecha: 01/01/2019,
Categorías:
Dominación
Sexo con Maduras
Autor: Corn, Fuente: CuentoRelatos
... actuaba en consecuencia. Cuando finalmente llego el autobús, se sentó atrás del todo, retirando el vestido para sentir el asiento directamente sobre su piel, a salvo de miradas indiscretas por encima del hombro y sacó el móvil para mandar un mensaje a su Amo contándole como había pasado la noche y como había tenido que obligarse a parar dos veces para evitar correrse sin tener su permiso. Cuando llegó el autobús a la universidad ya estaba Ainara esperándola, se dieron dos besos y caminaron juntas hasta clase, hablando de todo un poco y como era de esperar, Ainara trató de sonsacarle algo sobre el chico misterioso que habría logrado cambiarla. Al pasar a la altura de "su" cuarto de baño, Laura, sonriendo y mirando hacia el interior del aseo, le dijo: — Quien sabe? Quizás algún día te lo cuente. — Cabrona!! —exclamo Ainara con los ojos abiertos como platos. — Y una mierda! Ya estás hablando, cuéntamelo todo. Laura, riendo a carcajadas, aceleró el paso camino de clase dejando a Ainara plantada en mitad del pasillo hablando sola. Faltaban apenas cinco minutos para las once de mañana cuando el profesor dio por terminada la clase, Laura, recogió los apuntes y se dispuso a ir al baño, Ainara, de nuevo, se quedó con las ganas, pues tenía pensado acosarla a preguntas hasta que le dijese algo. Se ofreció a acompañarla, pero Laura rechazo la oferta guiñándola un ojo mientras le decía que con ella cerca no podría concentrarse. Al llegar al baño se quedó de piedra, había un letrero ...
... colgado de la puerta, indicando que no se podía entrar, que estaba fuera de servicio. Dudó unos instantes y pensó en ir a otro baño, pero no, ese era "su baño". En el había leído su primer mensaje, era su lugar de encuentro, donde leía los mensajes que le enviaba a las once de la mañana en punto. Finalmente, abrió la puerta y se coló en el interior del baño. Se encerró en el mismo cubículo de siempre, se quitó las bragas, dejándolas sobre la cisterna y levantando el vestido se sentó en la tapa. El contacto de su ya encharcado coñito con la fría tapa del baño, le produjo un escalofrío que recorrió todo su cuerpo. Sacó el móvil y mientras accedía al correo, susurro: — Buenos días, Corn. Cuáles son tus instrucciones hoy, mi cuerpo está presto para cumplirlas, AMO. La pantalla de móvil mostraba un mensaje nuevo, recibido un minuto antes. No tenía asunto y al abrirlo, aparecieron dos únicas palabras. Apenas seis letras hicieron que sus manos comenzasen a temblar. No podía ser, tenía que ser otra cosa, no lo que estaba pasando por su cabeza. Su corazón se aceleró y se quedó sin respiración al recibir el mismo mensaje una segunda vez: "TOC TOC" Levanto la vista del móvil y abrió lentamente la puerta del cubículo esperando no estar equivocada. Efectivamente, Corn estaba frente a ella, sonriendo. Mirándola a los ojos la atrajo hacia él y la besó en los labios. Sus lenguas lucharon por ver quién era capaz de dominar a quien. Finalmente, la obligó a entrar de nuevo en el cubículo y cerrando ...