Sara, un sueño cumplido
Fecha: 02/01/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Confesiones
Autor: Gabriel351, Fuente: CuentoRelatos
... recline de nuevo, nos volvimos a besar, luego me senté sobre la cama y ella quedó sobre mí, me tomo por el cuello y nos besamos profundamente. La tome por la cola y ella empezó a cogerme, mientras no dejábamos de besarnos, ella estaba sentada sobre mí, sus rodillas dobladas, sus pies sobre el colchón y ahora ella cabalgaba sobre mi pene. Me abrazaba, me basaba en la boca y cabalgaba cada vez más aceleradamente, ahora no pensaba detenerla ella quería acabar y yo también, gemíamos y gritábamos juntos. Yo me deje caer sobre la cama, con ella sobre mí, ahora Sarita estaba arriba mío, ella siguió bombeando y el final ya era inevitable, sentí su vagina contraerse, un profundo alarido nació de su boca, yo la sujete fuertemente de su cintura, nos besamos mientras nuestros cuerpos se agitaban en miles de convulsiones, y mi pene lanzaba dentro de ella torrentes de cálido semen; Luego de las calma permanecimos así entre besos y abrazos largos minutos Cuando volví de la ducha ella estaba acostada boca abajo, así que su adorable culo estaba a mi vista, me apoderé de él, besé primero sus piernas, y acariciaba su cola, besé sus nalgas, las chuponee, luego su espalda, bese su cuello, su boca me acosté sobre ella mi pene sobre su cola, y mientras la besaba dije a su oído con voz melosa y dulce. G- Tenés una cola maravillosa, podría decir que perfecta, muero por hacerte sexo anal S- Lo hice dos veces y no me gusto La bese, la lamí por todo su cuerpo, llego a un clima de terrible excitación y ...
... dije G- Probamos hacer la cola No dijo nada G- Te prometo que si no te gusta o te duele, te la sacó Ella me miro, y dijo: S- Una vez que me la pongas yo no te voy a importar G- Vos me importas mucho, no quiere perderte, no voy a hacer nada que pueda lastimarte, fuimos en busca de un lubricante en la habitación de Silvia, ella lubricó mi pene y yo su ano, ella estaba muy excitada luego de que hubiese lubricado su culo Ella se arrodilló sobre la cama, yo quedé parado en los pies de la cama, la posición era la justa, ella separó sus piernas, yo separe sus nalgas apoyé mi pene a la entrada de su ano, acaricie su cintura y dije, “si te duele para” Avancé suavemente en su cola poco a poco ella gemía, le pregunte si le dolía y respondió con un NO, y poco a poco lo fui introduciendo hasta entregárselo todo, ella suspiraba y gemía mientras mi pene entraba y salía de su ano… entonces dije G- te gusta S- Si Ella giró su vista hacia mí y dijo S- Te amo Ahora ella movía su cuerpo haciendo que mi pene entrase y saliese de su ano, ella gemía. Cuando Sara manejaba los movimientos, yo lleve mis dedos a sus labios vaginales y los acaricie, ella gimió profundamente y yo comencé a masturbarla, eso la enloqueció. La habitación era un infierno, los dos estábamos excitados y ardiendo de placer. Así pasamos varios minutos ella moviéndose para que mi pene recorriese su ano, y yo masturbando su vagina. S- Amor, no puedo más voy a acabar G- Si aguantas unos segundos lo hacemos juntos Y así paso fueron ...