En el probador con mi tío...
Fecha: 02/01/2019,
Categorías:
Gays
Masturbación
Autor: renovatio111, Fuente: xHamster
... saber a dónde mirar me limité a seguir probándome esos pantalones que él me había llevado.- ¿No te vistes? – le pregunté por fin.- No, así estoy cómodo. – respondió – Por cierto con los calzoncillos que tienes no vas a marcar nada de paquete en esos pantalones. Deberías comprarte unos como los míos. Mira tienen una movida para que se marque más la polla.- ¡Qué dices tío! – exclamé, más que pregunté aturdido. ¿Mi tío hablando de marcar paquete? ¿Mi tío pronunciando la palabra polla frente a mi con total naturalidad? ¡Menuda confianza parecía que habíamos ganado el uno al otro durante los últimos cinco minutos dentro del probador!- Si. Tu mira- sentenció.Se quito los calzoncillos con total normalidad y me los puso delante de mi cara- ¿Lo ves? Tienen un sistema para marcar más. ¡Me recuerda a un wonderbrá para machos!No me podía creer la situación en la que me hallaba. Mi tío totalmente desnudo, en unos probadores de una tienda del centro comercial, con la polla casi erecta. Y yo frente a él con los pantalones que me estaba intentado probar, por debajo de las rodillas. Por muy surrealista que pareciera aquello, no pude evitar fijarme en su polla. El tronco de esa verga era bastante grande y gordo, y tras la rosada cabeza, se le marcaban bien las venas. Salvo unos pocos pelillos en la base, parecía estar rasurado, al igual que aquel par de huevos de color tostado, lisos y sin vello alguno. Mi tío, prácticamente empalmado, notó que le miraba y no desaprovechó el momento.- ¿Te ...
... gusta mi polla sobrinito? – me preguntó mientras se sobaba un poco, agarrándose aquel pedazo de carne con una mano.Me puse colorado sin saber qué decir. La verdad es que si que me gustaba, tanto, que yo también estaba empezando a ponerme cachondo.De pronto mi tío comenzó a reirse, rompiendo mi silencio.-¡Era broma! –exclamó él sin dejar de reir- Pero venga, desnúdate y pruébate mis calzoncillos ya verás que paquete te hacen.De pronto, quizás para añadir más testosterona a aquella extraña situación entre hombres, me apeteció muchísimo ponerme aquellos calzoncillos que poco momentos atrás él había llevado y acomodar mi vergote y mis cojones en aquella prenda que antes ya habían acomodado los suyos. ¿Cuál sería la sensación? Empecé a desnudarme intentando que no se me notase que estaba un poco caliente pero mi tío no perdía detalle. Me quedé desnudo exceptuando mis bóxers.- Venga ahora quítatelos y ponte los míos que con ese cuerpazo que tienes te van a quedar de maravilla sobrinito – me dijo mientras él ya no disimulaba su erección, con su tranca apuntando al techo.Yo permanecí callado. Me quité los calzoncillos y así estuve en pelota picada delante del espejo y de mi tío. Ahora mi rabo había comenzado a unirse al de mi tío en aquellas labores de apuntar al techo. Y por alguna razón ya no me importó.- ¡Vaya, vaya! –exclamó en medio de una sonrisa- Ya no te voy a poder llamar sobrinito. A partir de ahora te tendré que llamar sobrinote. ¡Menudo rabo tienes! – sentenció acercándose a ...