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Solo éramos dos
Fecha: 16/02/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Lauer, Fuente: CuentoRelatos
... sonrisa le preguntó si se hospedaba en el hotel al igual que nosotros. Se presentó como Frank y su compañero Miguel. Ambos aprovecharon la presentación para darle un par de besos y un leve roce a su cintura. Estaban en una convención comercial durante todo el fin de semana. Eran en total unos 40 vendedores. Durante un rato seguimos hablando y finalmente, ante su insistencia, nos invitó a una nueva copa. Con las copas ya en nuestras manos, Frank preguntó por qué todavía no habíamos bailado. -No soy bueno bailando y Erika necesita de alguien que no tenga dos pies izquierdos. –le respondí. -Miguel es muy buen bailarín. –respondió Frank al instante Miguel la miró fijamente y sonriéndole le ofreció su mano. -¿Bailamos? Ella tomo su mano y me buscó con picardía. -Diviértete y disfruta. –fue mi respuesta. Se encaminaban hacia la pista de baile, justo en el momento que la orquesta daba por finalizada su actuación. El servicio de bar también dio por finalizada su jornada. Se quedaron solos en la pista de baile mirándonos y riéndose de su mala suerte. Miguel aprisionaba a Erika de la cintura y así, bien juntos, volvieron hacia donde nos encontrábamos. Iban hablando entre sonrisas de lo decepcionados que estaban por haber perdido la oportunidad del bailar. Seguimos todos bromeando y diciendo cosas como "la próxima vez!", sabiendo que nunca más nos volveríamos a ver. Habíamos llegado a un punto donde yo quería "una más". Me incliné hacia Erika y le pregunté si nos tomábamos la última ...
... copa en nuestra habitación. -Por qué no, gracias. –Respondió Miguel- No tenemos bar en las habitaciones. Había entendido mal. No pretendía invitarlos a nuestra habitación. Nos habíamos divertido juntos un buen rato, así que miré a Erika y ella se encogió de hombros. Así que los cuatro nos dirigimos hacia los ascensores. Frank y Miguel nos agradecían la oportunidad de tomarse una más. Llegamos a la habitación, encendí la música y me situé detrás de la pequeña barra. Erika se sentó en uno de los taburetes. Esta vez al cruzar las piernas dejo que la totalidad de su muslo fuera visible. La blonda de la media emergía casi por completo. Estaba relaja y no se apercibió de ello. Frank aproximó el otro taburete junto a ella y se sentó. Miguel, de pie, apoyando la espalda en la pequeña barra se situó justo en su otro costado. Mientras preparaba las bebidas, nuestra conversación continuó desenfadada y divertida. Brindamos por habernos conocido. -Tenemos un baile pendiente. –dijo Miguel al acabar uno de los brindis, mirándola y rodeando de nuevo su cintura. -Cierto, pero hay poco espacio aquí. –Erika mirando la habitación. -Me permite. Miguel y Frank recolocaron el sillón rápidamente. Así consiguieron el espacio necesario para poder bailar. -Me permite. –ofreciendo Miguel con cortesía su mano. Empezaron con el baile. Miguel era realmente un buen bailarín. Ella también lo es y respondió con soltura a sus movimientos. Formaban una excelente pareja de baile. Movimientos suaves y sensuales, ...