La primera vez que me vine sin tocarme
Fecha: 27/02/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... acostado sobre su cama con el bulto duro bien marcado sobre el short, mi hermano me preguntó si estaba caliente pero la respuesta era muy obvia. Él me empezó a acariciar la verga por encima del short y yo me quité la camiseta para que él pudiera morderme y chuparme los pezones. Mi hermano se quitó la playera y se sentó sobre mi cama. Entonces yo le agarré el bulto que ya estaba bien duro y como él también venía con ropa deportiva, le saqué la verga por una pierna del short y se la empecé a chupar. Me encantaba el sabor salado de su verga y como me llenaba toda la boca hasta la garganta. Yo tenía 14 años y mi hermano 17, así que él estaba mucho más desarrollado que yo y su verga era mucho más grande y gruesa que la mía, aunque ahora estamos casi del mismo tamaño (yo la tengo más larga y él más gruesa). Me quité el short y me acosté sobre mi cama, mientras mi hermano me chupaba la verga. Me encantaba que se la metiera hasta la garganta y se asfixiara un poco, además de que le gustaba lamer todo a su alcance desde los testículos hasta el pecho. Su lengua recorriendo mi piel era como un delicioso masaje sexual, al mismo tiempo asqueroso y delicioso. Mi hermano se tomó su tiempo disfrutando de mi abdomen pero yo ya estaba demasiado caliente, así que lo empujé despacio para que se volviera a sentar, me puse crema en el culo y me senté sobre su verga. Yo ya tenía mucho control de mi cuerpo, así que podía sentarme tranquilamente y tragarme todo su miembro con mi culito. Empecé a ...
... moverme como si estuviera en una película porno, mi hermano se puso mega caliente agarrándome las nalgas y me sujetó por la cintura para cogerme con fuerza mientras me chupaba el cuello. Yo estaba decidido a mover mi culo para extraerle la leche, apretaba y relajaba mi interior imaginando que lo estaba ordeñando con el suave interior de mis nalgas. Mi hermano me empujó y quedé sentado sobre sus piernas frente a frente, mientras seguíamos conectados, yo no quería que se me fuera a salir su verga del sulo. Entonces con cuidado nos fuimos dando vuelta hasta que yo quedé acostado boca abajo y él parado a un lado de la cama. Me agarró una pierna y la subió de una forma que mis nalgas quedaron bien abiertas y podía cogerme hasta el fondo. Yo apretaba mis ojos y mis dientes cada vez que sentía su miembro hasta el fondo. Luego me cargó y me puso sobre su cama, que está más alta que la mía. Entonces sin salirse me hizo dar vuelta una vez más y quedé con mis piernas en sus hombres y él parado a un lado de su cama. Yo tenía la cola más abierta que nunca y estaba gozando de esa verga como nunca, mi hermano me agarró de los tobillos con fuerza y empezó a clavarme salvajemente su pitote por culo. Para este punto yo estaba gimiendo sin poder controlarme, nunca había sentido su verga tan salvaje y deliciosa. Entonces empecé a sentir una sensación que ya me era muy familiar, empecé a sentir como si fuera a venirme. Para aguantar más tiempo dejé de tocarme la verga y agarré las sábanas con fuerza ...