Todo Por Una Apuesta
Fecha: 03/03/2019,
Categorías:
BDSM
Autor: PincesaDiana, Fuente: SexoSinTabues
... fue perfecto, dejarnos la casa para calentarme y hacer la apuesta correspondiente para que perdiera y así hacerme su esclava. De pronto entendí lo tonta e inocente que había sido por caer en la trampa, pero ya me había convertido en su esclava y no había vuelta a atrás. Ya de noche, me volvieron a lavar con la manguera, tuvieron que estar un buen rato para quitarme todo lo que llevaba pegado a mi cuerpo y que el sol había resecado. Ni siquiera me soltaron, me colocaron un mordaza inflable en la boca, la hincharon a tope, me metieron en el maletero del coche, cerraron y arrancaron, después de un buen rato, abrieron el capó, me sacaron, casi no podía caminar, pues la postura no era muy cómoda y después de lo pasado no me quedaban muchas fuerzas. Mercedes y Marta me cogieron del pelo y me arrastraron hacia el interior de una casa. Me taparon los ojos y me dijeron que no me moviera para nada, hicieron como marcar donde tenía los pies para saber si me había movido, se fueron y me dejaron mucho tiempo sola, a oscuras y sin poder moverme, mis piernas flaqueaban y mis pies, ansiosos de moverse, empezaron a hacerlo. No sé cuánto tiempo pasó, pero cuando se acercaron recibí un par de bofetones que me tiraron al suelo ¡Puta más que puta, no sirves ni para estar quieta! Mientras que me estaba chillando, recibía patadas por todas partes, tirándome del pelo me levantaron y me arrastraron a una sala, cosa que vi cuando me quitaron la venda, me colgaron con los brazos estirados y las ...
... piernas abiertas, al lado había como si fuera un quirófano, una mesa llena de instrumental médico y una mujer pequeñita, morena, pero muy guapa que me estaba estudiando y palpando todo el cuerpo, los pezones, mi sexo, me quitaron la mordaza y siguió con mi lengua, tirando de ella, pensaba que me la iba a arrancar. Las extremidades me dolían de tenerlas estiradas, la piel me ardía y los mordiscos de las hormigas habían hecho mella en mi sexo y pezones. Una vez terminada la exploración me dejaron sola otro buen rato con el instrumental delante para que me hiciera una idea de lo que me esperaba. En mi mente pasaba de todo, desde que me descuartizaran hasta que me pusieran algún aro en alguna parte del cuerpo. Pero seguro que cualquier cosa que pensara no tendría que ver con la realidad. Pronto me di cuenta de que así sería. Entra la mujer pequeña me coloca un aparato de dentista que me deja toda la boca abierta, sin posibilidad de cerrarla, coge unos alicates, agarra mi lengua y con un punzón empieza con saña a perforar mi lengua, agarra un anillo con una cadena colgando, me lo coloca en el agujero, después hace otro al otro lado de la lengua y me coloca otro anillo con cadena, me llena la boca de alcohol, que me tengo que tragar si no quiero ahogarme, siento como me quema toda la boca. Me mira y ¡Queda perfecto! Con las cadenitas podrán arrastrarla con la lengua fuera, eso le dolerá bastante y obedecerá al instante. Con los mismos alicates agarrón uno de los pezones, pero cambió de ...