Mi primera vez, mi primer relato.
Fecha: 07/03/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: javiamor, Fuente: RelatosEróticos
Mi Primera vez. Hola, mi nombre es Javiera y les cuento un poco sobre mí. Tengo 27 años, mido 1,60. No soy muy flaca, tampoco gorda, pero siempre han resaltado mis grandes pechos. Tengo el pelo castaño claro, largo hasta la cintura y soy de piel muy blanca. Soy muy sociable, aunque con los hombres un poco tímida, pero me fascinan. Bueno, les quiero contar cómo fue mi primera vez y espero que les guste el relato y que lo disfruten mucho. Tenía 20 años y una noche me llama Diego (23), un amigo que me gustaba mucho pero con el que nunca había pasado nada más allá que un par de besos. -Hola, Javi! Me invitaron a una fiesta y quiero que vayamos juntos... ¡Qué emoción, el niño que me gustaba me estaba invitando a salir! Mis padres no me dejaban mucho ir a fiestas así que inventé que iba a casa de una amiga y me junté con Diego. Me puse unos jeans negros ajustados y una polera con un escote que dejaba resaltar mis pechos, sin parecer vulgar. Un poco de perfume, labial y salí. Nos juntamos cerca de mi casa y a penas me vio pude notar que la noche iba a ser especial, me miró e inmediatamente me tomó por la cintura, me acercó hacia él y me besó. Creo que quería que en la fiesta no pudiera mirar a otro o en realidad le gustó cómo me veía. Fuimos a la fiesta de su amigo, bailamos un rato y noté que varios me miraban y él sólo me agarraba la mano y me robaba un beso en cuanto podía. Se tomó un par de cervezas y más cariñoso se ponía. Como yo no tomo alcohol estaba muy consciente de todo, ...
... pero así y todo no vi sus malas intenciones conmigo. Como a la 1 me dio frío, no llevé chaleco. Diego me dijo, vamos a la casa a buscar algo y te abrigas. Vivía sólo en un departamento. Llegamos y me senté en un sillón mientras él buscaba algo. Se demoraba mucho. Pregunté qué pasaba y me dijo que se había mareado un poco con las cervezas. Colocó música y se sentó a mi lado. Puso su cabeza en mis piernas y comencé a acariciar su pelo. -Aún tienes frío? -Me dijo -Sí, un poco, contesté. Se acercó tomó mi cara entre sus manos y comenzó a besarme suavemente. Me dijo que mis besos le gustaban mucho y que lo tenía loco con mi perfume, y yo sólo sonreí y lo besé, ahora con más intensidad. Sentí cómo comenzó a bajar sus labios, y a besar mi cuello y ya no cabía duda de qué camino tomaríamos esa noche. Simplemente no pude resistirme. Mi cuello es mi punto débil. Lo dejé seguir y seguir hasta que los primeros gemidos, tímidamente,comenzaron a salirse de mi boca. Sus manos comenzaron a subir desde mi cintura hacia lo que ya sabía que era su objetivo: Mis pechos. Lo hacía sobre la ropa, pero al primer contacto con ellos mis pezones se endurecieron, y él lo notó. Tomó mi polera y me la sacó, la tiró al piso y luego me sacó el sostén, la verdad es que casi me lo arrancó y mis enormes pechos quedaron a su disposición. Se abalanzó sobre ellos y comenzó a besarlos. Pasó su lengua sobre mis pezones endurecidos y comenzó a chupar y a chupar y a chupar. Mmmmmmhhh qué rico se sentía! No quería que ...