1. VIVENCIAS VI


    Fecha: 08/03/2019, Categorías: Hetero Autor: XCITANTDLC, Fuente: SexoSinTabues

    ... enseguida palpar mi raja y mis labios vaginales, delineándolos con los dedos sobre mi tanga; supongo que de inmediato, notó lo mojado de mi chucha, ya que para ese tiempo, no aguantaba mi propia calentura. Por su parte, la mano que desde hacía tiempo estaba en mi culo, de repente se retiró y no la sentí durante un tiempo después de unos segundos, por lo que pensé que había abandonado el vagón pero en su lugar, sentí un pedazo de carne caliente, grande y húmedo, que se acomodaba entre mis nalgas. De inmediato, pude adivinar que se trataba de un pene erecto, el que con delicados movimientos, se deslizaba de arriba hacia abajo, donde era increíble sentir su enorme capullo rozando mi vagina y mi anito, logrando sentir cómo me humedecía levemente mis grandes nalgas con líquido pre eyaculatorio. En un determinado momento, unas manos se acomodaron en mi cadera, tomando mi tanga por los costados y arrancándomela de un fuerte tirón, para deshacerse de tal estorbo. Acto seguido, el pene se acomodó, ya lubricado por el líquido seminal, a la entrada de mi ano y yo me levanté levemente sobre las puntas de mis pies, ...
    ... presentándole lo más posible mi culo, para ayudar al desconocido, quien tomó los cachetes de mi culo y los separó, para que me penetrara sin dificultad. Situación que me asusto ya que ningún otro hombre me había cogido solo mi hermano, en eso volteo mi hermano y al mirar mi rostro, me preguntó si me sentía bien, a lo que le respondí que sólo era el calor que reinaba dentro del vagón, lo que me estaba incomodando pero que no era algo grave. Aquel fulano me tallaba con su verga intensamente como si me estuviera cogiendo habrán sido algunos minutos cuando siento en mi cola los chorros de semen y vaya que la fuerza con que me golpeaban era bastante y con qué abundancia, parecía que arrojó como un litro de mocos, que incluso sentía a la perfección cómo se deslizaban lentamente por mis nalgas. Simultáneamente, por las maniobras de la mano que jugaba con mi raja, humedecía por completo la tanga, llegando a escurrir mis flujos por mis muslos, la leche de ese tipo. Después de eso me acomode lo mejor posible mi ropa y hacer como si nada hubiera ocurrido. No sé si mi hermano se habrá dado cuenta o no pero que día había tenido. 
«12...12131415»