Confesiones del Padre Arturo: Katy parte 2
Fecha: 09/03/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Padrearturo3, Fuente: SexoSinTabues
... había salido hacia mi auto. Una vez adentro de mi cuarto abrir dicha maleta y me dispuse a prepararlo todo lo más rápido que pude. Ya llegada la hora me dirijo hacia la puerta donde la señora al verme llegar se despide dirigiéndose a Katy. -No le des problemas al Padre y obedécele que regresaremos con tu papa de la reunión más tarde. ¿Entendiste?- instruye a Katy en mi presencia. -Pierda cuidado hermana.- la despido mientras se cierra la puerta. Mientras observo desde las ventanas como se aleja hacia la calle la emoción empieza a recorrer más aun mi cuerpo y me invade un sentimiento de dominación al observar a Katy que me mira sonriente. Por fin estaba a solas y en un lugar muy seguro junto a esa niña que llevaba un vestidito rosa de una pieza que cubría todo su pequeño cuerpo y por momentos, al ser de seguro uno antiguo, le quedaba apretado y dejaba observar su culito respingón que tanto me enloquecía. -Muy bien, Katy. Ahora que tu mami se ha ido. Porque no nos divertimos un poco antes de que te vayas a dormir. ¿Qué te gustaría jugar?-pregunto a Katy. Katy sale un momento y trae sus muñecas para comenzar a jugar, con paciencia un momento me siento mientras la observo jugar mientras ella me cuenta como jugaba a la casita, ya sabéis los típicos juegos de niñas inocentes de su edad. -Muy bien…Ahhh, ya veo.- respondo a lo que acaba de contarme sin mucha importancia.- Y dime Katy ¿quieres jugar algo aún más divertido? -Siii. ¿Qué es? Padre.- pregunta Katy curiosa. -Oh, se trata ...
... de un juego muy bonito y divertido. Pero se trata de un juego secreto. ¿Sabes lo que es un secreto, Katy?-pregunto bajando la voz. La niña se queda callada un momento sin saber que contestar. -Es algo que no se puede decir.-me respondo mientras hago la señal de silencio. -¿Porque?- pregunta ella. -Porque tiene que ver con Diosito. Es un juego que los sacerdotes no podemos jugar con cualquier persona.-señalo con gesto serio.- Pero como tú eres una niña tan linda y buena lo voy a jugar contigo.- le digo mientras acaricio su cabecita sonriendo. -¿Si? Yupii.- festeja Katy con inocencia.- ¿De qué trata, Padre? -Oh, se llama: “La Bendición”.-respondo con gesto alegre.- Tú conoces a las monjas, ¿no? -Si. Padre.- responde Katy. -Las monjas ayudan al Padre Eugenio a rezar y con las tareas divinas. Ambos alaban a Dios en una bendición especial que el Padre hace.- le indico mediante gestos.- Por eso hoy vamos a jugar a la Bendición. Yo voy a ser el Padre Eugenio y tú serás una monja. ¿Me has entendido? -Sí, Padre.- contesta.- ¿Y cómo alaban a Dios? - Oh, no te preocupes. Yo te voy a enseñar a jugarlo, es fácil y muy divertido. Solo debes seguir mis instrucciones. Ahora nos vamos a mi habitación.- señalo. - ¿La habitación pequeña, Padre? - pregunta ella. -Correcto, mi vida. Ahí vamos a jugar. Ya verás que nos vamos a divertir. Y de paso bendeciremos tu casa, así de ahora en adelante tus papis estarán muy contentos y felices.- le digo.- Sígueme, Katy.- le ordeno mientras la llevo del brazo ...