El tormento de Zorya
Fecha: 01/04/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... comenzaron a vestir a Zorya rapidamente mientras la sentaban contra un árbol. -¡Tengo tu espada, Zorya! -dijo el chico del arco, entregándole el arma mientras ella empezaba a revivir. -¡Bebe despacio, niña! -dijo Narrus mientras le daba otro vaso que bebió avidamente. Al oir la confusión, Lord Villard abrió la puerta de la casa sólo para encontrarse frente a frente con las horcas de tres furiosos aldeanos, que le sacaron de la casa mientras más y más personas se unían a la comitiva.El sorprendido Lord Villard vio cómo le llevaban de nuevo al ccentro de la aldea, dónde vio centenares de cadáveres de sus hombres rodeándole. Una voz surgió de la multitud: -¡Cortadle la cabeza! -los aldeanos rugieron su aprobación ante la idea, pero otra voz se alzó sobre el gentío: -¡NO! -dijo Zorya en voz alta, aún temblando después de su tortura mientras se dirigía hacia su violador- ¡NO VA A MORIR ASÍ!- gritó mientras le lanzaba una espada al sorprendido caudillo- ¡MORIRÁ A MIS MANOS... EN UN DUELO! Los aldeanos retrocedieron, formando un circulo que rodeaba a los dos espadachines. Lord Villard recogió la espada, aceptaando el desafio, y le dedicó a su oponente una sonrisa arrogante. Los dos combatientes comenzaron a tantearse, andando en círculo, tratando de encontrar una abertura para poder lanzar una estocada. Tras un momento, los dos se lanzaron hacia delante y entrechocaron las espadas. Lord Villard era un poderoso adversario y supo aprovechar la ventaja de que su enemiga estuviera ...
... debilitada, lanzándola al suelo de un golpe. Zorya se recuperó enseguida y rodó sobre si misma para evitar el golpe que le lanzó a continuación. El caudillo sedoniano arremetió contra Zorya, pero ella se apartó rapidamente, hiriéndole en el brazo. -¡Asquerosa ramera! -gritó, lanzándose contra su adversaria con furia, casi alcanzándola en el pecho. Una vez más volvieron a acecharse y esta vez fue Zorya quién atacó primero, recibiendo un puñetazo en el estómago mientras Lord Villard contraatacaba. Zorya quedó tendida en el suelo, luchando por respirar. Lord Villard se quedó por un momento mirando a la multitud y después se encaminó hacia su enemiga caída. Sintiendo el peligro, Zorya lanzó su espada hacia adelante en el momento en el que su oponente se disponía a asestar el golpe final, y le atravesó el pecho. Mientras caía de rodillas, sangrando, Zorya le dio la espalda y se marchó, pero Lord Villard se puso de pie con dificultad y se lanzó a por ella. -¡Zorya, cuidado1 -gritó el chico. Instintivamente, Zorya se volvió y decapitó a su enemigo de un solo espadazo. La muchedumbre retrocedió unos pasos cuando la cabeza cortada se detuvo a pocos pasos de ellos. Exhausta, Zorya cayó de rodillas y Narrus la cogió justo a tiempo cuando se desmayaba. Narrus y el chico la llevaron hasta la casa. -Descansa, pequeña -susurró mientras miraba a su sobrina, tendida en la cama, y la cubría con las sábanas-. Nos veremos cuando estés despierta. Varios dias después, Zorya se despertó y se encontró ...