MI PAPA. PADRE DE MIS HIJOS
Fecha: 07/04/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: gabita, Fuente: SexoSinTabues
RELATO REAL..¿QUIEN DECIDE HASTA DONDE PUEDE LLEGAR EL AMOR DE PADRE E HIJA,? Mi historia ocurrió hace ya mucho tiempo, mi papa tenía 32 años, siempre alegre, cariñoso y muy juguetón con mis hermanos, conmigo algo menos juguetón ¨porque con las niñas no se podía ser brusco¨, vivíamos un ranchito en lo profundo de la sierra, a media hora en caballo del pueblo más cercano, recién había cumplido yo 13 años, era una niña más bien flaca, lo que creo yo resaltaba más las tetitas que ya desarrollaba, mi madre en su avanzado estado de embarazo del sexto hijo, se sentía muy cansada para ir a la labor a llevarle comida a mi papa, así que me mandaba a mí, los primeros días llegaba con él, esperaba a que terminara de comer y luego regresaba a la casa, pero cierta tarde muy calurosa, me puse un vestido suelto de tirantitos que además ya me quedaba chico y la parte de abajo apenas y me llegaba a la mitad de los muslos, por otro lado no llevaba sostén, como no tenia, mi madre me hacía poner una camiseta, pero ese día tan caluroso, opte por no usarla, el caso es que cuando llegue con mi papa, se me quedo viendo en forma diferente por unos momentos, luego se sentó en un tronco y mientras comía sentía sus miradas como si quisiera ver más allá del escote o más dentro de la falda, cuando termino sus alimentos me hiso parar frente de él, tomando los tirantes del vestido, los deslizo por los hombros bajándolo lo suficiente para destapar mis tetitas, las agarro una con cada manos dándole ...
... apretoncitos. Mira tú, me dijo, ya no tas tan niña, aunque me extraño un poco su conducta nunca pensé eso fuera algo malo, al contrario, el contacto de sus manos en mis tetitas resulto muy agradable, segundos después me bajo más el vestido dejándolo caer al suelo, para luego bajarme los calzones hasta las rodillas, pasando las yemas de los dedos sobre el escaso vello púbico. Solté una risita porque me hiso cosquillitas, mira nada mas dijo, si ya hasta pelitos tienes, después me paso un dedo por la rajita, que me hiso sentir un delicioso cosquilleo que subía por dentro hasta el fondo del mi vientre, y después como si nada, me planto una nalgadita y me dijo que ya no le quitara tiempo y me fuera a ayudar a mi madre. Al otro día volví a llevarle comida a mi papa, con un vestido similar y claro, sin camiseta, en cuanto termino de comer, me pidió me quitara el vestido y me sentara de lado en sus piernas, así, con una mano me abrazo por la cintura y con la otra se puso a jugar con mis tetitas, me gustaba tanto como las apachurraba con los dedos. Después paso a mi rajita, frotándola con suavidad, suspire y pregunto, ¿te duele o te gusta? Se siente rico, musite, luego me hiso ponerme de pie, dándome una sonora nalgada, que me dolió un poco, diciendo, mi costal de huesos, pero con buena grupa, rio un poco y me mando de regreso a casa. Al llegar por un momento pensé platicarle a mi madre como jugaba con mi papa, pero por alguna razón en lo profundo de mi mente pensé era mejor guardarlo en ...