Mujer al fin: primera vez
Fecha: 29/10/2017,
Categorías:
Transexuales
Autor: karinatv, Fuente: SexoSinTabues
... besarme los pezones y a tirar de ellos con los labios y hasta con los dientes, me encantaba lo que hacía y algunos gemidos escapaban de mis labios. Esta vez fuí yo a abrazarlo por la cintura y a atraerlo a mi para sentir la dureza de su miembro en mi estomago, mientras él no dejaba de amasar mis nalgas y mis piernas. Alberto se despojó de sus ropas, no me pidió mi consentimiento, no hacia falta. Admiré su falo erecto que me apuntaba. - “Chupa” - me dijo y yo no me pude resistir. Me arrodillé delante a él como había visto en peliculas y me llevé a la boca aquel mazo de carne. Inexperta, me vinieron arcadas, pero quería disfrutar este momento así que insistí hasta que me acostumbré a esta presencia en mi boca y en mi garganta. Con mi lengua saboreaba el glande y los liquidos que brotaban en abundancia y con mis labios jugueteaba en toda la extensión del viril musculo. Mi Alberto disfrutaba y me instaba a continuar y yo obedecía hasta que inesperadamente se vino en mi boca. Sorprendida no supe que hacer, pero instintivamente atiné a seguir succionando y mamando como queriendo extraer todo el liquido blanco que me inundaba, que chorreaba por la comisura de mis labios y que habia tragado disfrutando por primera vez de su dulce sabor. Sentí perderse la rigidez entre mis labios, excitada y conforme por haber hecho gozar a mi macho me alcé pero Alberto quería mas, me despojo de mi falda y ante la vista de mi diminuta tanga y de mis carnosas nalgas, la flacidez dió paso casi de ...
... inmediato a una nueva erección. -Ponte en cuatro – me ordenó. Si, yo también quería mas y obedecí. Hizo a un lado el hilo que cubría mi raja y apuntó su verga a mi virginal agujero. Empujó y el dolor se hizo presente. -Espera- le dije – hazlo despacio, soy virgen- Esta vez con mas cuidado, colocó la punta de su falo en mi orificio, y con suave presión empezó a penetrarme. Lubricado por sus propios jugos, esta vez el dolor de la defloración era mas soportable, cerré los ojos y me concentré en percibir cada milimetro de musculo que me invadía hasta que su pelvis entro en contacto con la mia. Estaba totalmente ensartada y sus vellos pubicos cosquilleaban en mis partes intimas. Mis contracciones involuntarias me producian placer y la idea de haberme entregado totalmente me hacía volar de ilusión. Alberto comenzó a moverse tomandome de la cintura y bamboleandome a su ritmo se repitió en mi la senzación de vertigo y vacio que habia experimentado dias atras, pero esta vez con el gozo de sentirme perforada y el placer generado por el movimiento de este mastil en mis entrañas. Infinitos minutos estuvimos así, él penetrandome y yo soportando estoicamente estas embestidas. Le pedí cambiar de posición, se sentó en el sofá y al verle el falo asi erecto me dieron ganas de saborearlo una vez mas, lo mamé con pasión dejandolo impregnado de una mezcla de saliva y liquidos seminales. Acto seguido me coloqué encima de él, tome su miembro con una mano, lo acomodé en posición y me dejé caer clavandome ...