SALIDA A UN BAR LLAMADO SEUZ (BOGOTA) - Relatos Eróticos

SALIDA A UN BAR LLAMADO SEUZ (BOGOTA)

... llevar y cada una de mis manos se fue al pene de mis hombres, los masajee un rato, mientras ellas me tocaban las nalgas, mi pene, mis piernas y consentían mi parte baja encima de las medias, ya bien arrechita y ellos también me dijeron que si íbamos a una sala más privada y les dije que sí, me baje el vestido y los seguí, llegamos pero había otro hombre, mis acompañante le pide que si puede salir y así lo hizo, cerraron la puerta y automáticamente se bajaron los pantalones y dejaron sus miembro afuera, me quede en la mitad de los dos, así empezó otro manoseo más intenso y fogoso, y mientras ellos lo hacían los masturbaba, un pene era pequeño, peludo y delgado, el oro un poco más grande y grueso. Así que el primero fue el pequeño, jajaja, me puso de enfrente contra la pared, me subio el vestido, me bajo las medias y la tanga hasta la parte baja de la mi cola, me le incline para exponer más mi colita a su pene, y el otro me pidió que se lo mamara le dije que sí pero si tenía condón, respondió que no y le dije que no lo haría, el otro tampoco tenía así que solo los deje disfrutar sin mamar y sin penetrar, como iba diciendo teniendo mi colita abierta y expuesta me acerco hasta sentir mi ano, ya sintiéndolo ahí cerca cerré mis nalgas y el empezó a masturbase ahí, y yo me movía duro hacia atrás tratando se hacer como si me penetrara, también me movía en círculos lo cual dio sus primeros frutos, me dejo las nalgas y el anito cubierto de su leche, mientras que el otro solo se ...

... masturba y yo me masturbaba y a veces recibía ayuda, mi otro acompañaba con su miraba y su mano en su pene esperando su turno. Yo muy coqueta le dije que me había dejado húmeda y le dije que si tenía papel para limpiarme, me lo paso y para limpiarme me agache y abriendo mi cola y mostrando mi ano a mi otro acompañante como diciendo sigues tú, y sin decir mucho se me acerco y me lo arrimo hasta el ano, me mordía la espalda y me cogía del pelo, y al igual que el otro empezó a embestirme y yo le respondía moviéndome bien duro hacia atrás haciendo sonar mis nalgas contra su pelvis, así como el anterior llego rápido pero este no me dejo la leche en mi cola, la atrapo en sus manos. Me subí mi tanga y mis medias, baje el vestido, me arregle un poco, estaba un poco despeinada, me acomode m pelo y salimos, fui a la mesa a saludar a mi amigo el cual me vio sudando y me invito una cerveza, me bebí la mitad de un sorbo mi vaso, y le conté lo sucedido. Me dijo que tenía que irse y se fue. Me quede ahí sola, ya más suelta y coqueta, me acomode en el sofá mas cómoda, me quite los zapatos dejando mis pies al aire, y sentándome un poco más atrevida y mostrando un poco más de la cuenta, acariciándome las piernas muy suave y delicadamente, y efectivamente hizo su efecto, no paso más de cinco minutos cuando uno de mis acompañantes se acercó nuevamente y hablamos un rato mientras no perdía la ocasión de tocarme las piernas y más arriba. Entre charla me dijo que si volvíamos y me dejaba besar el anito, y ...