Mi primera vez
Fecha: 22/05/2019,
Categorías:
Gays
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... para poder decirle que esta situación era nueva para mí y no sabía por qué razón me enloquecía tanto, lo que él contestó que no me preocupara que lo dejara manejar la situación, en ese momento me paró, me quitó la camiseta me dio un beso en mis tetillas, me sentó y me quitó los zapatos para después pasarme sus mano acariciando mi polla por encima del pantalón yo sentía que iba a reventar pues cada vez se ponía caliente la situación. llegó el momento en que me quedé desnudo y él me pidió que hiciera lo mismo que lo desvistiera pero cuando yo pasé la mano sobre su polla quise volverme loco, pues qué bello se sentía acariciar tremendo pedazo de carne, no dudé más y cuando estuvo completamente desnudo lo tiré al sofá y me dirigí hacia su polla, la cual me estaba volviendo loco y sin decir nada le besé el vientre, la entrepierna para después llegar al mástil perfectamente bien formado de unos 18 cm. Vi como en la puntita del mástil salían unas gotitas y al probarlas me iba volviendo en una puta deseosa de que se la follaran. Sin perder tiempo me introdujo todo aquel pedazote de carne en mi garganta qué feliz me sentía al tenerla dentro de mi boca pues con movimientos suaves de arriba hacia abajo, como toda una puta hecha y derecha. Él se acomodó de una manera en la cual quedamos en un perfecto 69 y gozando los dos, no pude contenerme más y me corrí dentro de su boca era una eyaculación diferente; pero grandiosa, pues el placer de ésta me volvía loca y me hacía gemir como nunca. ...
... Mi mozo me volvió y dándome un beso me dio a beber de aquella rica lechita que le había dado, se colocó de una manera en que su mástil quedara entre mis piernas y besándonos pude sentir que él quería meter aquel trozote de carne en mi culito, y sin perder tiempo me voltió para que él, pudiera quitarme mi virginidad (de mi culito) él mojando un dedo con su saliva, lo introdujo por mi culo, la sensación era extraña para mí pero cuando más lo metía más gustaba, y de repente metió otro más, ya eran dos dedos los que me estaban acariciando en eso entró uno más y el placer se fue incrementado a tal grado que nuevamente tenía mi polla bien dura, y dándome un beso por el cuello y la oreja sentí cómo su delicioso trozo de carne entraba en mí, al principio era algo molesto pues el dolor, no me dejaba disfrutar. Pero como los movimientos eran suaves el dolor se fue transformando en placer. Llegué a ponerme de perrito y cuando estaba así no podía dejar de pedirle que me la metiera, me volvía loco cuando en el mete y saca sus bolas llegaban y chocaban en mis nalgas, los movimientos se volvieron un poco rápidos y en un instante sentí como algo dentro de mí corría y pude comprender que era mi mozo quien se había corrido pues sus gemidos y sus manos en mi cintura de lo decían, al sentir que terminó me acosté, evitando que el trozo de carne dentro de mí se saliera y quedando debajo de mi mozo sentía cómo su mano acariciaba mi cabello y me decía con una voz divina que era la primera vez que ...