Por amor a la familia (día cinco - parte uno): El comienzo
Fecha: 31/05/2019,
Categorías:
Transexuales
Incesto
Autor: lesliefer, Fuente: CuentoRelatos
... una mujer. Tome un brassiere del cajón y lo coloque alrededor de mi pecho y pude sentir la suave tela de algodón en mi piel, me sorprendí al abrocharlo casi al primer intento, ya lo estaba dominando, me encantaba esa sensación de sentirlo apretado alrededor de mi torso y la textura del material tocando mis pequeños pezones rosados. Busque en el cajón la parte de abajo, dudaba entre una tanguita morada hermosa y una de encaje, me decidí por la de encaje, la toalla callo a mis pies liberando mi ahora erecto miembro. Comencé a ponérmela, esa sensación subiendo las piernas seria indescriptible, la erección no me permitía ponerme la tanga, estaba nuevamente excitado, tuve que relajarme para que mi pene perdiera su firmeza, pero fue casi inútil, solo logre hacer que bajara un poco su rigidez, así que contra toda naturaleza acomode lo que me estorbaba y me subí totalmente la prenda, lo acomode bien entre mis piernas. La sensación de la ropa interior apretando mi pelvis, la rigidez de mi miembro entre mis piernas y la excitación del momento hicieron que el líquido comenzara a salir, podía sentirlo tocando el área donde debería estar mi “vagina”. Me dirigí al closet, no podía creer que estaba buscando un uniforme escolar, abrí el área de mi prima mayor, que era el que me quedaría, no tuve que buscar mucho, lo encontré perfectamente colgado, lo descolgué despacio, admirándolo, le quite del gancho y lo extendí sobre la cama, me puse la blusa, sentí la suavidad de la tela mientras la ...
... abrochaba, sentí como al llegar a mis senos se abultaba, abroche el ultimo botón, el del cuello, un cuello redondo, con dos onditas que caían sobre la blusa, al estilo de una blusa de niña pequeña, era un contraste raro, infantil pero sensual. Tome la falda de cuadros y la observe mientras una sonrisa resaltaba en mi rostro, se veía más corta de lo que aparentaba; me agache y comencé a subirla por mi cuerpo, llegando a la cintura, subí el cierre y abroche el botón, entonces me di cuenta de lo que estaba viviendo en ese momento, estaba viviendo la vida de una chica normal, lo que hace cada día, sentí placer cuando abroche mi falda a la cintura y sentía como me tocaba mis piernas desnudas, era corta, pero no tanto, entonces me di cuenta que la ropa interior estaba mojada, mi liquido preseminal era ya muy abundante por tanta emoción erótica, pero no me había percatado hasta ese momento. Tome las calcetas mientras me sentaba en el banquito frente al espejo, sentí cada centímetro de mis piernas mientras subía las blancas calcetas, la sensación era diferente a un día normal, las piernas recientemente rasuradas hacían que las sensaciones fueran mayores. No podía quitar la mirada del espejo, lo que estaba viendo era demasiado excitante, una colegiala vistiéndose por la mañana, sentada con su pierna cruzada, sin permitir que algo se viera bajo su falda, mientras se ponía sus calcetas. Tome la peluca y me la acomode con cuidado, la cepille porque estaba hecha un desastre, le puse un ...