Recuerdos con mi hermana
Fecha: 18/06/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: Mara, Fuente: CuentoRelatos
Aunque hace ya tanto tiempo de aquellos sucesos en mi mente aún están frescos como si hubieran ocurrido apenas hace unas horas. El placer es de esas cosas que no se olvidan tan fácilmente, aunque se rememoran intensamente algo falta y, es que ¿Por qué son tan pocos los momentos así en esta vida? Un día de tantos Lora y yo nos tuvimos que ir por un corto tiempo a la casa de la abuela porque papá estaba remodelando la casita, iban a hacer un baño y una recámara más y eso hizo que fuéramos a dar con la abuelita, Lora su bebé y yo. Nos quedamos en el cuarto junto a la cocina, estos estaban al fondo de la casa junto a un patio donde había una fuente vieja y con agua verdosa. Lora llevó muchas ropa y cosas para ella y su bebé, yo solo algunos pantalones vaqueros y playeras sin cuello de varios colores y casi todas estampadas, unas trusas y calcetas. La abuelita que era muy tierna también muy ingenua y se acostaba muy temprano no parecía sentirse incómoda con nosotros en su casa, mi abuelo (no era el padre de mamá) iba y venía por su trabajo de camionero, casi nuca estaba y era mejor porque era algo agresivo e intolerante con los gays, imaginaba que se pondría furioso si me veía “vestidita de niña” por eso solo lo hacía en la noche cuando él no estaba, aunque era obvio para mí que el señor Manolo si sabía de mi afeminamiento pero disimulaba por mi abuela. Cierta noche como a las 10, me puse a escuchar la vieja radio que había en ese cuarto, una radio del “abuelo” como era muy ...
... grande tenía varias bandas de onda corta y yo buscaba estaciones de países lejanos para imaginar que podía estar en ellos al menos por la radio. Lora, decía: “Apaga esa madre y déjame dormir” La apagué resignadamente, y me acomodé en la única cama matrimonial donde dormíamos los tres apretados y el bebé en medio. Esa noche hacía mucho frío y de broma le puse un pie helado mío a Lora ¿Hija de puta qué te pasa? Lorita tengo frío, pues mete las manos entre tus huevos de joto y déjame descansar que al ratito le tengo que dar el pecho a mi nene. Me acosté dándoles la espalda e intenté dormir, aunque me era imposible por la cantidad de café que estuve tomando horas antes. Así que me levanté sigilosamente y abrí la maleta de Lora, alumbrada solo por la lamparita de plástico que a manera de veladora le servía a Lora para no despertar al bebé. Comencé a buscar una minifalda y una blusita para ponerme algo de ropa de mujer y salir al patio, sentarme junto a la fuente y echarme un cigarrillo viendo las sombras de las nubes delante de la Luna y poder pensar un poco. Esa noche no llegaría el abuelo, andaba por Chiapas, eso lo sabía bien. Fumando estaba cuando llegó a mi lado Lora, en pantaletas y solo con una camiseta de tirantitos. Se sentó junto a mí y me pidió un cigarrillo. Pinche puta ya me quitaste el sueño. Es que tomé mucho café. Cabrona en un rato despierta mi niño y luego ando toda con hueva. Lorita no tenemos nada que hacer no mames. ¿Julis te gusta estar aquí? La neta si por la ...