Cumplí mi fetche de axilas femeninas con una mujer de 34 - Relatos Eróticos

Cumplí mi fetche de axilas femeninas con una mujer de 34

Una mujer de 34 años que conocí en el autobús, fue con quien perdí mi castidad a los 20 años y además cumplí mi fetiche por las axilas femeninas. Esto ocurrió hace pocos días, fue una experiencia bastante excitante y espero que ustedes al leer lo que intentaré relatar de la manera más similar les ocurra lo mismo. Tengo 20 años, soy estudiante de educación superior, mi verga mide 14,5 cm erecta, no mentiré, es la verdad, no como en relatos que se jactan diciendo que les mide sobre los 20 cm, hay que ser realistas, mi tamaño está dentro del promedio y es de 14,5. Soy alto y contextura normal aunque con unos kilos de más (no he llegado al sobrepeso eso sí). Bueno, viajo a menudo de mi ciudad natal a la ciudad donde está ubicada mi universidad. En un viaje de regreso a la ciudad donde estudio en un autobús, me tocó ir sentado al lado de una mujer, muy bella y bien conservada para su edad, tenía 34 años y llevaba en sus brazos nada más ni nada menos que un bebé de un año y unos cuantos meses de nacido. Para haber afrontado un parto la mujer estaba estupenda, muy buen físico, color de pelo castaño y liso, pero lo que me cautivó desde que recién subí al autobús y buscaba mi asiento, fu su pronunciado y generoso escote que traía. En la parte superior de sus tetas se notaban unas venas no muy gruesas pero que si eran visibles y notorias (como las de toda mujer embarazada o que han parido hace algún tiempo). Llegue hasta mi asiento y ella con su bebé en brazos y con un bolso ocupando ...

... el asiento que me correspondía. La saludé y le dije que tenía el asiento en el que ella tenía el bolso, gentilmente ella lo retiro y me senté a su lado. Le di las gracias y nada más hasta ese momento. Como viajaba durante la tarde hacía mucho calor y con los movimientos del autobús no tarde en dormirme, lo cual duró muy poco ya que el bebé de la mujer que iba a mi lado comenzó a llorar y yo desperté de golpe. Ella me pidió disculpas y que se percató de que me desperté un poco asustado, a muchos creo que les a ocurrido que están durmiendo lo más bien y un grito o llanto los despierta de manera brusca que uno tiende a dar un salto del susto y lo repentino que es despertar. Bueno, como comentaba la mujer me pidió disculpas, y se excusó diciendo que ya llevaba un buen rato viajando en el autobús y que su bebé ya iba inquieto, (mi viaje es de aproximadamente unas 3 horas y esta mujer venia de una ciudad antes por lo que llevaba una hora más en el autobús). Le dije que no se preocupara, que la entendía pero que se me sería difícil volver a conciliar el sueño, por lo que ella me responde que para matar el tiempo del viaje podíamos ir conversando y así lo hicimos. Así supe que ella iba a la misma ciudad que yo, que tenía dos hijos (el bebé y otro más de unos 10 años) y que el mayor lo había ido a dejar con sus abuelos maternos para pasar unos días de sus vacaciones. También me contó que era casada y que su esposo trabajaba fuera de la cuidad donde ella residía, y que viajaba a su casa ...