Gentilmente me quitó los Zapatos
Fecha: 20/07/2019,
Categorías:
Gays
Autor: giacomo319, Fuente: SexoSinTabues
... sentía que desde mi Polla fluían litros y litros de semen, sin parar, sin poder detenerme o contenelo, llenando mi pecho y mi estómago de semen blanco y viscoso. De verdad no lo sé, pero, fue tan potente mi venida que pareció llegar a caer sobre la almohada, pasando sobre mi cabeza. Sus ojos también se desorbitaron, yo sólo miraba su rostro, su torso y mis piernas montadas sobre sus hombros, como en la irrealidad de un sueño mojado. Le excitó tanto mi orgasmo que tampoco pudo más, sacó su verga de mi culo, se quitó el condón y comenzó a masturbarse. Vi cómo se le hinchaba la cabeza hasta tomar un tono casi morado, entonces, su semen comenzó a dispararse a borbotones desde la punta de su Polla sobre mi estómago y mi pecho, en una fusión del mío con el suyo. Termino con mucho placer, se le podía ver en la cara a kilómetros, que rico haberlo tenido tan cerca y tan dentro de mí. Aunque yo estaba apenas volviendo en mí, me senté y comencé a lamer su verga, sentí como de a poco perdía su dureza. Seguí lamiendo, saboreando el semen que aún ...
... brotaba en menor cantidad. No era tan rico como el líquido pre-eyaculatorio, la sensación de tenerlo en mi boca, tampoco era tan agradable, pero, al levantar mi vista para ver su cara, podía ver el placer que sentía y mi agradecimiento era tal que lo limpié hasta que no salió una sola gota más. Él se recostó, yo, terminé de mamar su verga, ya flácida. Me recosté sobre su pecho. Los dos estábamos tan sudados y cansados que no dijimos nada, nos bastaba con escuchar nuestra respiración agitada y entrecortada mientras poco a poco todo volvía a la calma. Cerré mis ojos, sentí su mano cariñosa frotando suavemente mi espalda. Caímos en un sueño placentero y profundo, creo que habremos dormido durante un par de horas. Al despertar, el me miraba cariñoso con sus lindos ojos oscuros y mi pierna, que se encontraba apoyada sobre su entrepierna, sintió nuevamente ese pedazo duro y grande de carne. Sólo nos regalamos un par de guiños traviesos y……. que más les puedo contar. Desde ese día soy el amante más fiel de la verga. Nada es igual, nada se le compara.