(6) Cuestión de bragas
Fecha: 29/08/2019,
Categorías:
Lesbianas
Sexualidad,
Autor: Mister Neron, Fuente: CuentoRelatos
... una habitación hasta encontrar lo que ella deseaba: su ordenador portátil HP. Cuando volvió al salón, Fabián ya estaba desnudado y Paola se lo follaba en el tresillo. Ella saltando desde arriba y él agarrándola de las tetas desde abajo. Brandy se aproximó a Ana con una tarjeta plastificada en la mano. -¿Cómo va nuestro chico? -Como todos los tíos. Ven un coño bonito y se vuelven gilipollas. -¿Lo has encontrado? -Sí, toma, esto es. -Genial, Brandy. Encárgate de que Fabián esté ocupado una hora. Iros turnando. Que no pare de follar. -Hecho. -¡Choca! -¡Yeahhhh! –aulló Brandy. -Venga, zorrón, yo aviso cuando acabe. Se dieron un besito en los morritos y Brandy se unió a Paola en el coito. -Hey, yo también quiero. -Genial. Un trío –vitoreó Paola sin dejar de saltar. Ana se encerró en otro salón contiguo desnuda y tomándose un Martini con hielo. Desde aquí podía percibir el jaleo sexual de sus dos amigas con Fabián. Se conectó a Internet con su portátil y de aquí a la website de una empresa privada de chips surcoreanos. En el login introduzco el código de seguridad de la tarjeta plastificada, la que Brandy robó Fabián. ACCESO COMPLETADO. -Bien… Fabián tenía acceso a todo el sistema empresarial y Ana se fue directa a proyectos y fusiones. Copió todos los archivos, esquemas y planos en un pen de 1000 TB, y a continuación hizo una llamada. -Ya lo tengo todo… Exacto, todo… Vale… Sin más dilación, Ana salió del apartamento a la calle donde le esperaba un norcoreano trajeado en negro. ...
... -Esto es tuyo –le entregó Ana el pen-. ¿Qué coño miras? -Nada. Ana sonrió complacida. Seguía desnuda y no era común hacerlo en mitad de una calle. -Saluda a Kim Jong-un de mi parte. Me muero por follármelo. ¿Se lo dirás? -Ya lo sabe. -¿Recibió mis bragas sucias? -Por supuesto. Y quedó fascinado. Contactará contigo este mismo mes. -Mi coño espera caliente y ansioso. El norcoreano bajó la mirada a su entremuslo un segundo, pero Ana, muy observadora, se percató y sonrió feliz. Volvió al apartamento y al salón donde la polla de Fabián seguía dura y en acción. -¿Cómo vais, chicas? -Este tío es un cerdo. No deja de babearme las tetas –reía Poala. -Y parecía gilipollas el menda –rió Ana también. Asió con la cabeza y Brandy la entendió-. Paola, ¿meamos juntas? -Vale. Y ambas chicas desaparecieron del salón. -¿Adónde han ido? –ni las vio irse Fabián. -Creo que no has dado la talla. -¿Cómo dices? -Que esperaban una polla hecha y derecha, y no esa mierda tiesa que te cuelga. -Pero no entiendo… yo creía que… -Llamaré a un taxi para que te recoja. Ya te lo dije. Nenitas no quiero. -Puedo hacerlo mejor, de verdad. -Coge esa pilila de chico de 10 años y te largas a tu puta casa, ¿queda claro? -Muy claro. -Me voy a ver porno en mi móvil. Cuando vuelva en cinco minutos no quiero verte aquí, o si no grito por la ventana violación y estará la policía aquí de inmediato. ¿Te lo explico todo otra vez? -No hace falta. -Venga, hopo, a tomar por culo –salió Ana del salón y conteniendo la risa. Todo lo ...