Chupándoselo a mi compañera de piso
Fecha: 14/11/2017,
Categorías:
Lesbianas
Autor: isabel xc, Fuente: RelatosEróticos
... su piel, porque el amor que se estaba despertando en mí hacia ella, me hacía sentir temor de alejarla si lo intentaba, sabiendo que ella era heterosexual, «me estaba enamorando». ¡Todas ellas se pasean por el piso semidesnudas!, ¡o desnudas del todo!, «como solo somos chicas», yo las sigo con la mirada cuando salen desnudas del baño y también doy paseos casi desnuda, ¡tienen unos chochos preciosos!, cada una con su estilo de depilación, Raquel tiene afeitados los lados del pubis y los labios mayores, y un cepillo de pelos en el centro de unos dos centímetros de ancho y unos nueve centímetros en vertical, de pelos tan espesos y negros como el vello oriental, pero más suaves (en su gatito negro es en el que más me he fijado). Este sábado me ha vuelto a pedir la habitación Victoria y otra vez dormiré con Laura, mi deseada morenaza que acaba de regresar del pueblo donde ha pasado una semana, y me hace mucha ilusión dormir con ella otra vez, ¡tanta ilusión me hace que solo de pensarlo se me mojan las bragas! Al salir Laura de la ducha veo que parece dolerse al andar, no sabía qué le pasaba, y le pregunté. —Laura noto como si te doliera algo por tus gestos. — ¡Horrible Isabel!, mi novio es un bruto y le gusta por detrás, y yo que soy tonta «y que quería probar también» lo dejé que me la metiera y tengo el culo dolorido —«me habló muy bajito como una confidencia». —Échate crema íntima Laura, veras como se te recupera —le aconsejé. —Sí, ¡sí ya me pongo en la entrada!, pero no se me ...
... quita el dolor —dijo muy tierna. Era sábado por la mañana y esa noche dormiríamos juntas. Cuando llegó el novio de Victoria nos saludó a todas muy cordial, y al mirarme a mí se fijó en la minifalda que llevaba y en mis firmes muslos, yo desvié la mirada y pensé que si le diéramos ocasión lo intentaría con todas, es bastante fresco y se le nota. Ya era de noche, me di una buena ducha de agua caliente y fui a la habitación de Laura, al llegar la encontré metida en la cama. Abrí la ropa de la cama para tenderme junto a ella y la encontré de espaldas, completamente desnuda sobre la sábana, mostrándome su firme culo, su cintura estrecha y su bonita espalda, con una piel de un moreno intenso; al verla sentí como mi chocho se humedeció bajo mi camiseta corta, la cual apenas me tapaba una parte del pubis, dejando a la vista mi chocho desnudo y sin bragas, la excitación y el deseo me hicieron sentir más desnuda que nunca; entonces la saludé y ella se dio la vuelta hacia mí. — ¡Ya estoy aquí Laura!, pareces la maja morena hay tendida, tu preciosa piel oscura hace que vea mi propia piel como la leche. —Hoy deseaba dormir desnuda, después de lo recatada que he tenido que estar en el pueblo, ¿no te importa verdad Isabel?, ¡y no seas tonta!, tu piel es preciosa también, eres una rubia espectacular, pareces escandinava, ¿lo eres? —No me molesta que estés desnuda solo admiraba tu belleza Laura. Yo soy escandinava a medias, mi padre es de aquí, del pirineo y mi madre es de Noruega, he salido ...