La madrina de mi comadre - Relatos Eróticos

La madrina de mi comadre

... rato volví a recuperar fuerza y me pidió que le metiera mi enorme pene que la dejara paralítica yo le dije que no tenia protección y ella me dijo que yo iba a ser el segundo hombre que se la cojee después de su marido y que estaba ligada y que quería sentir mi pene a rojo vivo la lleve a la cama le empece acariciar ella ya estaba toda mojada le abrí las piernas y las subí hasta mis hombros y empece a meter mi pene poco a poco sentía como se depositaba en esa vagina le veía la cara de dolor que estaba poniendo me pidió que parara un momento y le dije no te va a doler, metí otro pedazo hasta metérselo todo ella estaba como loca al sentir mi pene en su vagina entonces la empece a envestir poco a poco solo veía la cara de excitación que tenia. - Yo le decía te gusta Si que grande es, siento que me esta destrozando todo adentro pero es demasiado rico. Ayyyyyyyyyy si ya no aguanto más. Ayyyyyyy Te gusta SIIIIIIIIIIIIIIIIIII Su cara era de placer y dolor pero lo estaba gozando Cada ve me movía mas y más rápido que parecía que la cama se iba caer y daba gritos de dolor y pasión. Yo sentía que estaba calienten y sentía su vagina mojada de tantos orgasmos que había tenido. Yo seguía arremetiendo con mi pene que era como un misil que se llevaba todo a su paso cada vez mas y más rápidos nuestros gemidos se confundían en uno solo No se cuanto tiempo estuve penetrando esa vagina mi pene entraba y salía una y mil veces ya no aguantaba mas y nos vinimos los dos en un orgasmos mutuo, mi ...

... leche salía por la rajaduras de su vaginas en gran cantidad que quedando extenuado los dos nuestro cuerpos quedaron bañados en sudor y yo seguía prendada a ella como un perro por un rato. Después le dije que si nunca le habían penetrado por detrás y ella me dijo que no que era virgen, pero quería que le metiera verga, pero que se lo metiera con cuidado, se paro de la cama y busco en su bolso una crema. Yo la tumbe boca abajo en la cama y le abrí las piernas desde atrás, yo miraba de frente el su culo y de su abierta frente a mis ojos. Me puse atrás de ella y comencé a chuparle y lamerle las dos entradas al mismo tiempo, desparramando por ambos agujeros la cantidad increíble de flujo que salía ya sin control desde su interior. Podía sentir como se contraía el agujero de su culo ante el pasaje de mi lengua y adivine que no faltaba poco para el momento de poder clavársela por atrás. Yo le decía quieres que te lo meta por el culo, dime quieres, Ella me decía si, por favor. Métemelo por el culo...... SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII Entonce agarre la crema y la unte en mi pene y en su ano, me acomode por encima de sus espaldas, flexione mis piernas, la tome por las caderas y sin darle tiempo ni siquiera a respirar hondo, fui presionando con la cabeza de mi pene en el agujero de su culo hasta que sentí que cedía lentamente. Cuando ya había entrado la punta, sin demorar mas y sujetándola fuertemente desde atrás, le clave todo mi sexo dentro de ella. El grito de dolor que profirió solo hizo que ...