Batman y la nenita
Fecha: 31/05/2019,
Categorías:
Jóvenes
Tus Relatos
Autor: Ezzo , Fuente: RelatosEroticos-Gratis
... cuerpo, deteniéndose en mi paquete, abriendo mas los ojos me señalo mi entrepierna, porque tienes así tu ese, ¿Cuál ese? Le pregunte-de antemano sabia a lo que se refería pero fingí demencia, lo que pasa es que tengo un regalo para ti, como ya te comente ¿lo quieres? Este regalo no es cualquier cosa, mi regalo tiene poderes especiales, pero tienes que ganártelo, y yo te voy a decir como.
Primero tienes que darme un beso, La mire con una mirada lujuriosa que ella no noto por lo oscuro de la habitación -¿como?- me pregunto- acercándose a mi, -la tome de su manita acercándonos a su pequeña camita, me senté y abriendo las piernas la acerque a mi arrimándole mi paquete, que a esas alturas ya estaba para reventar, con una enorme erección que se notaba hasta china, la rodee con mis poderosos brazos y la acerque a mi boca golosa, le empecé a besar las orejitas, arrancándole una risa nerviosa pero a la vez sofocándola, me abrazo, demostrándome que no le eran indiferentes mis trabajos bucales, la tome con ambas manos y la levante en vilo era ligera como una pluma y la senté arriba de mi rodeándome con sus piernitas, su conejito quedo en contacto con mi verga que apuntaba hacia ella, la tome de la cintura y le daba pequeños saltos empujándola con mi verga como queriendo romper la ligera telita de su calzoncito, ¿te gusta?- le pregunte, aunque era obvio la nenita se retorcía como viborita.
Ssssiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii –gimió, con una voz muy débil- ¿Por qué no te quitas la ropa? –me ...
... pregunto- si lo pensé porque tanto faje ya me tenia sudando a mares, pero no quería perder mi identidad secreta.
Es peligroso –le respondí- nadie debe de ver mi rostro, no te molesta ¿Verdad? Pues no, pero me gustaría conocerte – me respondió- sin dejar de disfrutar mi manoseo en su cuerpito delicioso.
le fui besando sus mejillas, su cuellito, aspirando el suave perfumé de niña pequeña, le baje su blusita de tirantes, dejando al descubierto dos montañitas de carne con unos pequeños pezones de color rosa claro, los cuales metí en mi boca succionándolos suavemente, no quería hacerle daño, metí una de mis manos a su pequeño calzoncito acariciando sus nalguitas, eran suaves y tibias, estire mi mano y acaricie su conejito el cual ya empezaba a mostrar signos de humedad, su corazón latía cada vez mas fuerte y temblaba como una venadita que se sabe en peligro, sin embargo ella mas me apretaba hacia ella, busque su boquita succionándola con desesperación, con mi dedo índice le daba pequeños masajes en su anito cerradito, eso la excitaba mas y mas, mi verga ya no aguantaba mas la presión y busque su manita para que me acariciara la verga y le diera un ligero masaje y supiera lo que le esperaba, su manita recorrió todo mi tronco y le daba ligeros apretones a mi glande, que brotaba gotas de abundante lubricante,.
No quise esperar mas iba a darme placer con su boquita, así que la separe de mi y le metí un dedo a su boca, metiendo y sacando, metiendo y sacando, para que supiera como ...